Página 11 - El Heraldo de Saltillo 16 Abril 2013

Versión de HTML Básico

11
EL HERALDO DE SALTILLO
| Viernes 19 de Febrero de 2016
ÍNDICE
EDUARDO J. DE LA PEÑA DE LEÓN
CÁPSULAS SARAPERAS
FRANCISCO TOBÍAS H.
El fogonero, el maquinista y la deuda
En esta ocasión te platico,
estimado lector, sobre un mal en-
tendido entre dos extranjeros, que
la verdad creo que más que eso,
alguien se pasó de vivo, y esto su-
cedió aquí en esta bella ciudad de
Saltillo.
Resulta que en el año de
1905, en el Ferrocarril Nacional de
México laboraba el Sr. Link, quien
tenía el puesto de fogonero, cuya
tarea era alimentar el fuego de la
locomotora; y el Sr. Clebone, quien
era el conductor, ambos en el tren
marcado con el número 12.
En cierta ocasión Clebone
le prestó 50 pesos a Link, ya que la
esposa del fogonero había leído li-
bros de historia, y deseaba conocer
la ciudad de Guanajuato, en espe-
cial la Alhóndiga de Granaditas, y
el esposo, al no tener esa cantidad
de dinero, se lo pidió prestado al
conductor. Por cierto, la esposa de
Link había amenazado a su esposo
de que en caso de no conocer pron-
to esa ciudad del Bajío, le pediría el
divorcio.
El Sr. Link, doblemente
astuto, pidió prestado el dinero a
su compañero de trabajo y envío a
su señora sola, a conocer la puerta
quemada por “El Pípila” en la Al-
hóndiga.
Pero el mal entendido su-
cedió después del 18 de agosto de
1905. Ese día, como a las 9:30 de
la noche, cuando el tren con am-
bos trabajadores en la locomotora
pasó por el kilometro 908, Link fue
a supervisar la máquina auxiliar,
momento en el cual grito y cayó al
piso, perdiendo el conocimiento de
manera inmediata. Por su parte el
maquinista Clebone, al ver lo su-
cedido, pensó que su amigo, com-
pañero y deudor había sufrido un
infarto.
Link fue traído de inme-
diato a esta bella ciudad de Saltillo,
aun en estado inconsciente. A los
días de este acontecimiento, Clabo-
ne visitó en el hospital a su compa-
ñero, llenándose de alegría al darse
cuenta que la salud de su amigo ha-
bía mejorado, pero triste a la vez ya
que por el golpe el deudor sufría de
amnesia temporal, y el muy vivillo
no se acordaba del dinero que se le
había prestado.
Definitivamente en esta
anécdota sucedida aquí en esta be-
lla ciudad hay tres participantes:
uno muy ingenuo, otro muy vivillo,
y una que salió más vivilla al irse de
vacaciones a Guanajuato, y quien
quite que se haya ido hasta acom-
pañada, y no por el marido quien
se hacia el que no recordaba nada
para no pagar el viaje de su esposa.
0
0
0
Aún antes de que Hacienda
y el Banco de México anunciaran las
medidas económicas de contingen-
cia, y sin que haya entrado en vigor el
nuevo recorte al gasto público, ya en
diversos ámbitos se empezaban a ad-
vertir signos claros de una crisis que
afectará la economía de las familias
y el desarrollo de las comunidades.
Los efectos de la situación
económica adversa han alcanzado
incluso a sectores que en ocasiones
anteriores no se habían visto afecta-
dos, siendo el caso más relevante el
del Centro de Rehabilitación Infantil
Teletón que aplicó un reajuste de per-
sonal en Saltillo, y aunque se asegura
que ello no perjudicará a los niños
que ya reciben terapias, sí se habla
de la posibilidad de que no se reciba
a nuevos pacientes.
Trágica situación cuando se
tiene la infraestructura para atender
a quienes padecen de alguna disca-
pacidad física, pero el presupuesto
no alcanza para la operación del
centro y el pago de la nómina.
La percepción generalizada
es que hay demora en las aporta-
ciones que el gobierno estatal debe
hacer al CRIT Saltillo, y eso llevó la
situación a niveles insostenibles.
Si efectivamente se ha in-
cumplido con las aportaciones, sería
uno más de los muchos casos de
instituciones y empresas que se ven
perjudicadas por la crisis económica,
que en este caso arrastra el gobierno
estatal desde el inicio de la actual
administración.
Un gobierno que enarbola
la transparencia como principal
divisa, tendría que hacer público si
va o no en tiempo con lo que por
decreto debe entregar al Centro de
Rehabilitación.
Y en donde también se llegó
a la necesidad de recortes es en el
Ayuntamiento de Saltillo, que despi-
dió otro buen número de empleados
en esta última quincena.
Como agravante, ha tras-
cendido que no se están pagando li-
quidaciones a empleados conmás de
quince años de antigüedad laboral,
con el argumento de que no tienen
derecho a compensación alguna
por haber estado en la nómina de
confianza.
Muy grave que se siga
arrastrando con este vacío legal que
por una visión equivocada niega
derechos y deja en vilo a trabajadores
que al final de cuentas terminan bajo
un régimen especial que únicamente
les representa desventajas.
El origen de esa categoría
laboral se entendía en la lógica de
que al terminar el periodo de una
administración, concluyera la re-
lación laboral con quienes fueron
contratados, sin heredar un pasivo
a las nuevas autoridades.
Pero resulta que hay quienes
acumulan antigüedad más allá de
una administración, permanecen
laborando por años sin importar si
los alcaldes son de un partido o de
otro, y al final se quedan sin nada.
Esta es una situación injusta
y tendría que ponérsele remedio de
una vez por todas, y el mejor camino
es reglamentando el servicio civil de
carrera para las administraciones
municipales y estatal.
Y retomando el tema de la
situación económica, hay otras áreas
del gobierno en donde también se
comienzan a ver las repercusiones,
por ejemplo en seguridad pública,
por más que se insiste en que ahí no
llegarán los recortes.
Al menos en Saltillo es evi-
dente que hay menos patrullas vigi-
lando la ciudad, y por las noches en
lugar de incrementarse la presencia
policiaca para desalentar a los delin-
cuentes, se reduce drásticamente.
Crisis económica y poca
vigilancia. La mezcla es peligrosa.
Y ya se anticipa también
que serán cancelados, una vez más,
proyectos de infraestructura que han
venido posponiendo tanto el gobier-
no estatal como el municipal, lo cual
significa un retraso en el crecimiento
de la ciudad.
Los efectos se empiezan a
resentir también entre comerciantes
y prestadores de servicios que se
quejan del acoso de las autoridades
fiscales.
Se habla de que se han
incrementado las auditorías a pe-
queños establecimientos, lo que se
interpreta como una estrategia de
recaudación para amortiguar los
efectos de la situación que se está
viviendo en la economía.
Y sí Hacienda ya incomodó
a algunos sectores con sus audito-
rías, lo peor viene cuando se hace
presente el Infonavit, que se lleva el
primer lugar entre los rudos, y tanto
abogados, como contadores públicos
y patrones coinciden que en las se-
manas recientes se ha multiplicado
el número de procedimientos que ha
iniciado la institución para recuperar
pagos omitidos, haciendo incluso en
algunos casos cobros improcedentes.
Es pues un escenario com-
plejo el que se tiene enfrente, y en
lo único que no se ve merma es en
la publicidad oficial, enfocada prin-
cipalmente a la promoción de los
programas clientelares, signo claro
de las prioridades que se tienen ante
la cercanía de los procesos electora-
les.