A LA BÁSCULA

Y así se ríe la A

 Como dice la letra de una canción: ‘andábanos cortando rábanos, unos chiflábanos, y otros cantábanos’, ¿sí la oístes, digo si fuistes a alguno de los conciertos del grupo original, o por lo menos la letra vistes en alguna revista musical?

Según el Presidente de México, estas formas de expresión forman parte de las lenguas indígenas, y lo dijo como argumento para justificar que los libros de texto gratuitos aparezcan ahora con ese tipo de horrores. Según él, hay polémica sobre los cambios propuestos en estos libros con los que nuestros niños aprenderán a leer y escribir porque, según él ‘hay una negativa a incorporar lenguas indígenas’.

¿De verdad alguien le va a creer que ese tipo de expresiones forman parte de la cultura indígena?, que nos diga, pero que lo pruebe y compruebe, en qué lengua o léxico de los pueblos indígenas de nuestro país se habla de esa manera.

“(…) hay polémica por los nuevos libros de texto porque no quieren que se incorpore el habla de los pueblos, quieren que todos hablemos con tecnicismos, México es un mosaico cultural y la lengua tiene que ver con las raíces de nuestras culturas antiguas”, ha dicho.

Más que un elogio, esas palabras son una mentada de madre para nuestros pueblos originarios, que una cosa es que hablen en sus lenguas maternas, y otra que a través de los libros, se les instruya y enseñe a escribir o decir pendejadas.

En materia de educación, vamos como el cangrejo, cada vez más rápido caminando hacia atrás. En su momento el actual mandatario mexicano fue de los que más se burlaron cuando el secretario de Educación del sexenio pasado, Aurelio Nuño, fue corregido por una niña de primaria, que le corrigió al decirle que no se decía ‘ler’ sino leer. O, cuando uno de los libros de texto gratuitos del 2018, aparece una mano con seis dedos.

Ya en esta administración, como secretaria de Educación, Delfina Gómez dijo ante legisladores durante una comparecencia ante la Comisión de Educación del Senado de la República, que las ciudades de Cananea y Hermosillo estaban en el estado de Jalisco.

También en esta administración, la siguiente secretaria de Educación Leticia Ramírez, en una entrevista televisiva para hablar sobre el nuevo modelo educativo, y la conductora le cuestionó sobre cómo iba a aprender un niño sobre matemáticas en segundo de primaria y que ya está dentro del nuevo modelo educativo, la responsable de la educación en el país, luego de un prolongado silencio sólo acertó a responder: ‘no podría contestar eso’.

Y ahora, con el argumento de que forman parte de las lenguas indígenas, nos quieren vender la idea de que los ‘fuistes’, ‘dijistes’, venistes’ no son un horror en los libros de texto gratuitos, sino incorporaciones de lenguas originarias ¡A otro perro con ese hueso! Seguro los autores de estos textos son de los bilingües ‘cuatroteros’, porque hablan dos idiomas, español y pendejadas.

Tan sencillo que es admitir los errores y corregirlos como ya se ha hecho en otras ocasiones, pero no, estos son los momentos del todopoderoso, del infalible, del perfecto, y nada de lo que hagan él o su equipo puede traer el mínimo error.

Imagínese, si la corrupción descubierta en Segalmex por cerca de 17 mil millones de pesos, el fraude más grande que haya existido —y documentado— en la historia de nuestro país, se le minimiza, y al responsable del millonario desvío se le quita del puesto para alejarlo del ojo del huracán, pero se le premia asignándole nuevas tareas, este tipo de yerros son ‘pecata minuta’.

¿De verdad no son capaces de reconocer ni el más mínimo error?

Con esto de los planes presidenciales, capaz que nos vamos a dar cuenta que no se saben ni el abecedario, ya ve que ya van en eso del ‘Plan C’ -para que nadie esté pensando que ya se terminó todo, no-, y si este tampoco prospera como los dos anteriores a lo mejor nos seguimos al ‘PlanN’ o al ‘PlanW’

Y que nadie los critique porque nos van a salir que los conservadores quieren mantener ese orden del abecedario porque así conviene a sus intereses de hacer negocios y ganar dinero, pero no, en esta ‘cuatroté’, se tiene que transformar hasta el orden de las letras del abecedario, porque son liberales, y además no vamos a estar sujetos a lo que diga la Real Academia de la Lengua Española, porque ellos se creen que todavía somos su colonia, pero nosotros somos un país libre e independiente, y ese tipo de imposiciones son porque están acostumbrados a actitudes injerencistas.

Así que se enviará una iniciativa al congreso –sin que le cambien o le quiten ni un punto ni una coma- para que nuestro abecedario tenga el orden que indique el rey número non, ese que engalana su palacio con una linda reunión, donde las vocales son sus invitadas de honor, y el rey cuenta chistes blancos y uno que otro de color, para que ven sus invitados que hoy está de buen humor.

‘Y así se ríe la A, jajajaja, y así se ríe la E jejejejeje, y así se ríe la I jijijiji, y así se ríe la O jojojojo, pero no ríe la U ¿por qué no ríe la U? Porque el burro ríe más que tú.

Y si, si las vocales fueran invitadas al palacio del rey número non, así saldrían riendo con las burradas incluidas en los libres de texto gratuito, pero todavía más, con las explicaciones ofrecidas para justificar los yerros, porque si alguien espera que algún día este gobierno reconozca al menos uno, el más pequeño de los errores, está equivocado, eso no lo verán sus ojos jamás.

 

 

laotraplana@gmail.com

 

@JulianParraIba

 

Autor

Julian Parra Ibarra
Es director del diario digital La Otra Plana y la revista impresa Metrópolis. En cuatro décadas de ejercicio periodístico ha trabajado en diarios como El Norte de Monterrey, La Opinión-Milenio en Torreón, Esto en la Ciudad de México y a.m. en León, Guanajuato entre otros; ha sido conductor en programas de radio y televisión. Es columnista en varios medios impresos y digitales de Coahuila y Durango.
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