LA CAMPAÑA EN DEFENSA DE LA DEMOCRACIA Y LOS ARGUMENTOS DE LÓPEZ OBRADOR

 

Con la convocatoria a una marcha para el próximo 13 de noviembre, que partirá del Ángel de la Independencia al Hemiciclo a Juárez, legisladores de oposición, exconsejeros electorales, empresarios y organizaciones civiles, han iniciado una “campaña en defensa de la democracia y del Instituto Nacional Electoral (INE)”.

La movilización convocada a las 10:30 horas busca sumar a miles de ciudadanos en contra de la reforma electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Para tratar de entender la reacción de los grupos opositores valdría la pena escuchar qué dice el presidente Andrés Manuel López Obrador de su iniciativa.

En primer lugar, el presidente afirmó que la iniciativa de reforma electoral no pretende desaparecer al órgano encargado de organizar las elecciones, sino fortalecer la participación democrática del pueblo en las decisiones políticas del país.

En la conferencia de prensa matutina del pasado 3 de noviembre, el mandatario planteó que, a partir de esta reforma a la ley, el Instituto Nacional Electoral se convertirá en el de Elecciones y Consultas (INEC) que integrarán ciudadanos elegidos por la población de manera directa.

Para conformar este órgano, dijo, se establecerá en la ley que los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial deben presentar 20 candidatos cada uno para tener un total de 60 con paridad de género; él o la nueva presidenta del INEC será quien obtenga más votos por parte de la ciudadanía. De este modo se consolidará una institución independiente y autónoma.

De acuerdo con una encuesta realizada por el Instituto Nacional Electoral, a septiembre de 2022 el 51 por ciento de las personas se pronunció a favor de que se realice una reforma electoral; el 78 por ciento aprueba que las consejerías y magistraturas sean electas por la ciudadanía y el 52 por ciento coincide en sustituir al INE por el INEC.

 

La propuesta del Ejecutivo federal, enviada en abril al Congreso de la Unión, contempla reducir el financiamiento a la organización de los comicios, el presupuesto destinado a partidos políticos y los salarios del personal del nuevo órgano, así como del que labora en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

“Los funcionarios del INE y del Tribunal ganan más que el presidente porque ellos no acataron lo que establece la Constitución, retorcieron la ley, se ampararon y tienen fideicomisos, se dan la gran vida”, agregó.

De consolidarse la reforma, los ahorros se emplearían en la atención a necesidades en materia educativa y de salud, además de la ampliación de los Programas para el Bienestar.

El proyecto de la iniciativa de reforma incluye que se reduzca a 96 representantes la Cámara de Senadores y que la de Diputados pase de 500 a 300 integrantes, lo que también significa ahorros e ingresos en beneficio de la gente.

Así verbalizó el presidente los argumentos de su iniciativa:

“Nadie va a desaparecer al INE. Lo que se quiere es que el INE ya no esté en manos de la oligarquía antidemocrática, corrupta que, a través de los partidos, nombraban a los consejeros del INE, gente sin principios, sin vocación democrática y nombraban también a los magistrados del Tribunal Electoral”.

“Que no se gaste tanto porque el INE y el Tribunal significan un presupuesto de 20 mil millones de pesos; son los organismos más caros del mundo, los más onerosos. Es donde cuesta más emitir un voto de todo el mundo”.

“¿Cuánto nos ahorramos si ya no hay senadores y diputados plurinominales? En vez de 500 diputados, hay 300, solo los que elija el pueblo. (…) Que los que lleguen, tengan el voto porque si no, van a la lista y hasta se van de vacaciones, ya regresan para ocupar su curul y cobrar, pero ¿quiénes son? Quién sabe”.

Señala el catedrático Gregorio Peces-Barba que, para la teoría clásica de la democracia, las voluntades individuales tienden a converger en torno a núcleos de ideas que configuran programas políticos, ideas sobre la forma de organizar racionalmente la sociedad de la manera más óptima posible, orientado en fin.

Dice, además, que los partidos políticos han ido progresivamente constituyéndose como el eje fundamental de la racionalidad de la representación, ante la imposibilidad de la utopía de la democracia directa soñada por Rousseau. El “pactum subjetionis”, que conduce del individuo al poder, en cuanto pretende que el súbdito se convierta en ciudadano, inventará el instrumento de los partidos, como la única forma de reducir la complejidad y de impedir la fragmentación.

Gran reto y oportunidad tanto para partidos políticos como para ciudadanos, y, sobre todo, para nuestros legisladores, representa esta nueva lucha por buscar perfeccionar nuestros instrumentos de vida democrática.

Finalmente me gustaría insistir en que en una democracia moderna no es suficiente que los gobernados estén representados. La proximidad y conexión entre representados y representantes, entre elegidos y electores, constituye un elemento primordial en la legitimidad del sistema político y, en consecuencia, en la eficacia social del mismo. Toda la reforma electoral requiere el máximo consenso.

José Vega Bautista

@Pepevegasicilia

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