Ejército desactiva un explosivo por día: Guacamaya Leaks

CIUDAD DE MÉXICO.- Grupos criminales recurren con más frecuencia al uso de Artefactos Explosivos Improvisados (AEI) en estados como Chiapas, Guanajuato, Jalisco y Michoacán.

Esa conclusión consta en una presentación de la Subsección de Contraterrorismo S-2 del Estado Mayor de la Defensa Nacional (EMDN), adscrita a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), parte de la filtración de correos electrónicos de esa dependencia que hizo el grupo Guacamaya, y a los que EL UNIVERSAL tuvo acceso.

Fechado el 1 de agosto último, para una reunión de trabajo al día siguiente con delegados del Comando Norte estadunidense y de agencias de seguridad del país vecino, la presentación, de 30 diapositivas, revela que desde diciembre de 2018 al 1 de septiembre pasado se registraron 377 sucesos en 19 estados del país, y en los cuales aparecieron mil 765 bombas hechizas. De éstas, 52 explotaron, y personal militar desactivó y desmanteló el resto. En promedio, la Sedena desactiva casi un artefacto por día.

En Michoacán se reportaron 170 sucesos con 801 AEI; en Guanajuato, 126 y 497, respectivamente; en Jalisco aparecieron 227 dispositivos y en Chiapas, 118.

Esta utilización se agravó desde 2020, especialmente por la introducción de drones para cargar los explosivos.

Sedena reporta que el primer AEI usado en México ocurrió el 14 de diciembre de 2012, sin especificar el lugar.

Un AEI, que consta de siete piezas, como el sistema de iniciación, detonador y metralla, es un artefacto que se coloca manualmente, por lo general de fabricación casera, y dirigido a matar, herir, provocar daños materiales o infundir terror, según el Manual de Seguridad sobre minas terrestres, restos explosivos de guerra y artefactos explosivos improvisados, editado por el Servicio de las Naciones Unidas para la acción contra minas.

Sedena concluyó en que la fabricación de los dispositivos ha evolucionado, pues el diseño, sofisticación y componentes utilizados proporcionan seguridad al agresor y desarrollan mayor grado de letalidad.

Ante ello, la secretaría adquirió drones y antidrones, y creó el Grupo de Respuesta a Emergencias, dedicado a la búsqueda, localización, desactivación y análisis de explosivos.

Además, la Dirección General del Registro Federal de Armas de Fuego y Control de Explosivos, que regula la fabricación, comercialización, traslado y almacenamiento de materiales explosivos y sustancias relacionadas, ha suspendido y cancelado permisos.

El correo electrónico consultado indica que Sedena y otras instituciones han llevado a cabo cuatro ejercicios relacionados con el uso de explosivos en Puebla, Chihuahua, Zacatecas y el «Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles». (EL UNIVERSAL)