Informa IMSS Coahuila: alteraciones en ritmo intestinal pueden ser causa de cáncer

 

Entre las diferentes patologías oncológicas, la de colon ocupó el tercer lugar en mortalidad durante el año anterior 

Alteraciones en el ritmo intestinal -estreñimiento severo, colitis y gastritis-, pueden ser indicadores de la presencia de tumores en el intestino grueso, y estar relacionados con un cáncer de colon.

La oncóloga del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), adscrita a la Unidad Médica de Atención Ambulatoria (UMAA) No. 89, Rosa Gloria Nájera Hernández, explicó que este órgano se divide en derecho e izquierdo y las manifestaciones dependen de la parte que resulte afectada; cuando se presenta en la parte derecha, por lo regular se revela con anemia recurrente y, en algunos casos, puede derivar en insuficiencia hepática. Mientras que al registrarse en el lado izquierdo, uno de los principales síntomas es la obstrucción para la evacuación.

Añadió que cuando existe la sospecha de este cuadro clínico se realiza un estudio de laboratorio en las heces fecales donde se analiza la presencia microscópica de sangre, lo que puede dar pauta a una colonoscopia, que consiste en revisar con una cámara el tubo digestivo la cual ayuda a detectar, además del cáncer, otros padecimientos como pólipos, divertículos, úlceras y/o hemorroides.

La mayoría de las veces son tumores con muchos años de evolución que se detectan en etapas muy avanzadas, ello explica que, entre los diferentes tipos de cáncer, el de colon ocupó el tercer lugar en mortalidad entre los derechohabientes del IMSS Coahuila, durante el año anterior.

Si bien no existe hasta el momento un factor determinante, se considera que la ingesta excesiva de alimentos grasosos y de origen animal, así como la obesidad, son factores que pueden contribuir para desarrollar este mal, el cual se presenta tanto en mujeres como en hombres y por lo regular aumenta la incidencia después de los 35 años.

Como acciones de prevención, la doctora recomienda hábitos sanos de vida; llevar una alimentación balanceada, rica en fibra, con frutas, verduras y practicar deporte; moderar los procesados y enlatados, evitar grasas, alcohol, tabaco y el sedentarismo; aconseja realizar alguna actividad física diaria mínimo, 30 minutos, y en la medida de lo posible vivir en un ambiente relajado libre de estrés.

Ante la presencia de síntomas, es aconsejable acudir por atención médica inmediata y no dejar pasar el tiempo. (EL HERALDO)