Disputa de cárteles en Zacatecas lo convierte en narco estado

Informe de seguridad señala que en ese estado se vive una situación de ingobernabilidad, y lo califican como un narco estado, en medio de la disputa por el poder de dos Cárteles de la droga rivales

Zacatecas “se encuentra en una situación de ingobernabilidad, está dominado por criminales; es, sin duda, un narcoestado”, establece un reciente informe de inteligencia federal, en el que incluso se advierte sobre un próximo gran enfrentamiento entre cárteles, de acuerdo con una publicación de la revista Proceso, retomada por el periódico Reforma.

Según esta información, “el reporte de inteligencia elaborado por agentes del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador asignados a Zacatecas, expone a detalle los males que afectan al estado por el imperio de terror y muerte que, como astilla, clavaron los narcotraficantes”.

«Los constantes tiroteos, asesinatos y ejecuciones ocurren casi todos los días y se deriva de la lucha por el control territorial y de las autoridades de Zacatecas entre dos cárteles: el de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el de Sinaloa», destaca el informe de inteligencia federal.

La advertencia de que se viene un «gran enfrentamiento» entre las dos organizaciones criminales con el mayor control de territorios en las 32 entidades federativas del país para el trasiego y siembra de drogas ilícitas indica: «Desde hace unas tres semanas se detectó un aumento en el robo de carros a ciudadanos del estado o viajeros que vienen del norte y van al sur del país, por parte de elementos de los dos cárteles y otros criminales ligados a ellos».

Sigue el reporte: «Los autos robados son unidades que usan los delincuentes para enfrentar a sus rivales y para evitar dejar huellas que permitan a las autoridades federales rastrear su paradero. Creemos que el enfrentamiento entre el CJNG y el de Sinaloa podría ocurrir a finales de este mes de enero o en las primeras dos semanas de febrero».

El diagnóstico establece que lo que buscan los narcotraficantes es, para el caso del Cártel de Sinaloa, controlar y dominar los territorios de Zacatecas que colindan con Coahuila, Durango y Nuevo León, con rutas insustituibles hacia Estados Unidos.

«El Cártel de Jalisco Nueva Generación quiere los territorios de Zacatecas que tienen frontera con Jalisco y Nayarit; controlar esas regiones le implica a la organización un mayor poder de movimiento de drogas y de sus elementos», expone el análisis de inteligencia federal.

La radiografía de la situación de inseguridad y violencia ligada al narcotráfico en el estado norteño define a su vez un despliegue de fuerzas federales insuficiente para enfrentar y contener a los criminales que ejecutan y asesinan personas diariamente. En todo Zacatecas hay 17 bases de la Guardia Nacional con un total de 2 mil elementos.

En Zacatecas, recoge el informe de inteligencia federal, «se siente un ambiente de gran vulnerabilidad ante el azote de los cárteles y de la criminalidad (…) Hay un vacío de poder gubernamental».

ZACATECAS ZONA DE GUERRA ENTRE EL MAYO ZAMBADA Y EL MENCHO

Zacatecas se convirtió en un escenario más de la disputa que mantienen el Cártel de Sinaloa contra el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en el país desde mediados de 2020, pero esa lucha ya se veía venir un año antes, porque el estado es fundamental en el narcotráfico, de acuerdo con un reportaje publicado por Infobae.

Las autoridades de Seguridad comenzaron a notar el incremento de sicarios enviados por Ismael Zambada García, el Mayo, a partir de 2019, en municipios como Mazapil, Juan Aldama, Río Grande, Chalchihuites y Sombrerete hasta llegar a Fresnillo.

Al interior del penal de Cieneguillas también destacaron enfrentamientos y un posterior dominio del Cártel de Sinaloa, pese a que la mayoría de los internos eran del Cártel del Golfo que ha mantenido sus células en Tamaulipas y zonas aledañas.

El CJNG ya estaba consolidado en el sur de Nayarit así como en límites de Jalisco y otras entidades colindantes con su bastión. Pero poco a poco comenzó a pactar con remanentes del Cártel del Golfo para asegurarse del paso por el Noreste de México, donde atraviesan sus narcóticos producidos como el fentanilo y la cocaína traída desde Sudamérica.

Zacatecas queda en medio de las rutas de trasiego, pero también es la entidad más cercana al llamado Triángulo Dorado del narco, donde confluyen sierras de Durango, Sinaloa y Chihuahua. Esa zona ha sido dominada por el Cártel de Sinaloa en las últimas tres décadas.

De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la ubicación geográfica es el principal interés de los grupos criminales para sus actividades ilegales, pues colinda con nueve estados como Durango, Nayarit, Coahuila, Chihuahua, Tamaulipas, Jalisco, Guanajuato, San Luis Potosí y Aguascalientes.

“Eso lo convierte en un centro importante, también para los grupos delincuenciales representa una situación que les puede favorecer para sus actividades ilícitas”, explicó Luis Cresencio Sandoval, general secretario de la Sedena, el pasado 24 de noviembre.

En las últimas cuatro demarcaciones ya opera la organización dirigida por Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, y así consolida sus envíos. Pues del lado opuesto en el Pacífico y Noroeste se han consolidado sus rivales del Cártel de Sinaloa. Sin embargo mantiene operaciones en Baja California desde 2015 para asegurar sus intereses en la importante frontera de Tijuana.

La entidad que gobierna actualmente el morenista David Monreal está atravesada por dos importantes vías, incluido un tramo de la Autopista Panamericana, que conecta a Centroamérica con la frontera con Estados Unidos, y la Carretera Federal 54, nexo de Colima, sede de Manzanillo, el puerto con mayor tráfico de México, y la frontera estadounidense con Tamaulipas.

Ismael Camberos Hernández, secretario de Seguridad de Zacatecas desde 2017 a 2020, reconoció en su último año del cargo que en la entidad aún operaban el Cártel del Golfo, Cártel del Noreste, Cártel de Sinaloa, el CJNG, además de los Talibanes, una célula derivada de los Zetas y asentada en San Luis Potosí.

El funcionario fue sustituido cuatro meses después de que comenzó el aumento de asesinatos, en septiembre de 2020. En un inicio, las fiscalías zacatecanas y potosinas se culpaban entre sí por los muertos localizados en la frontera, pues alegaban que habían sido ejecutados en un territorio y abandonados en otro.

A finales de noviembre de aquel año fue difundido un video en redes sociales, donde miembros del CJNG desafiaban a los del Cártel de Sinaloa. Una pequeña caravana de tres camionetas tipo pick up y alrededor de 9 sujetos armados con el rostro cubierto, arengaban su presencia en la entidad norteña e invitaban al enfrentamiento.

Para octubre, el Mayo Zambada anunció a su brazo armado, el Operativo MZ y/o Grupo Flechas, quienes incursionarían desde Nayarit. Pero dos meses más tarde se anunciaron en inmediaciones de Pánfilo Nantera, en límites con San Luis Potosí, donde dejaron seis cadáveres, luego de semanas de múltiples asesinatos.

De acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, 2020 terminó con 789 asesinatos, 279 víctimas más que en 2019. Aunque la Sedena registra que en el mismo periodo sumaron 920 homicidios dolosos vinculados a la delincuencia organizada.

Ya en 2021 la violencia arreció en el estado solamente por la narcoguerra del CJNG contra el Cártel de Sinaloa. Entonces se registraron enfrentamientos en los límites con Jalisco como en Valparaíso. Otras víctimas como pobladores fueron desplazados en Teocaltiche y Mezquitic, algo que pronto experimentarían más localidades en la frontera con Zacatecas.

Mientras que en la entidad potosina hubo diversos asesinatos de policías. Pero fueron los cuerpos colgados en puentes los que destacaron en la pugna. El CJNG y las autoridades coincidieron en que esa era la firma de los operadores del Mayo Zambada.

Al notar ese escenario, el entonces gobernador Alejandro Tello rogó por el respaldo del presidente Andrés Manuel López Obrador en febrero de 2021. Era un acto desesperado y sin precedentes durante su administración. Por un lado, el priista enumeró las consecuencias que enfrentan sus gobernados y, por otra parte, reconoció que la capacidad de Zacatecas ya era insuficiente, porque la seguridad quedó en manos de fuerzas estatales.

Un mes después fueron enviados 4,778 militares y efectivos de la Guardia Nacional a municipios prioritarios como Fresnillo, Lázaro Cárdenas, Zacatecas capital, Calera, Guadalupe, Ojo Caliente y Valparaíso. Pero la disputa siguió y tan solo en un enfrentamiento de junio pasado se contabilizaron 18 muertos.

Los informes federales registraron aumentos mensuales en los asesinatos que pasaron de ochenta o noventa a una centena o 120 cada 30 días en 2021. En 11 meses ya había mil 50 homicidios dolosos, de acuerdo con el Secretariado de Seguridad, pero el Ejército contó mil 277 casos hasta el 24 de noviembre pasado y estimaba 1,447 víctimas en todo el año.

Con todos esos antecedentes, las autoridades federales anunciaron un plan de apoyo el pasado 25 de noviembre, pero dos días más tarde se reportó el asesinato de ocho hombres en Valparaíso por la narcoguerra. También siguieron los enfrentamientos en otras zonas, al igual que arrestos.  (Con información de Proceso, Reforma e Infobae)

https://www.infobae.com/america/mexico/2022/01/07/por-que-zacatecas-es-zona-de-narcoguerra-entre-el-mayo-zambada-y-el-mencho/