EN EL ARRANCADERO

A dos años de las elecciones de gobernador de Coahuila los partidos políticos empiezan a prepararse, a mover sus fichas. Dos años parece mucho tiempo, pero los partidos incluso ya perfilan a quienes serán sus abanderados y exponen también el divisionismo al que estarán sujetos.

El más “adelantado” en este aspecto es el PRI, partido que da muestras de perfilar como su próximo candidato al alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas, quien con la excusa de “compartir experiencias exitosas” y analizar proyectos se ha estado reuniendo tanto en la capital del Estado como en otras ciudades con los alcaldes electos, diputados locales y federales y representantes empresariales.

Sin descartar posibles sorpresas, todo apunta a que Jiménez Salinas será el candidato de unidad del Revolucionario Institucional. El edil saltillense, de 37 años de edad, ha rendido buenas cuentas al frente del Ayuntamiento de Saltillo y ha estado ubicado entre los alcaldes mejor evaluados del país.

En Coahuila el partido Morena ha avanzado hasta colocarse como segunda fuerza electoral. Se prevé que la elección de su siguiente candidato a gobernador atravesará por un período ríspido, de acusaciones y divisionismo, problemas que ya empezaron. El senador Armando Guadiana, que viene de perder la Alcaldía de Saltillo, admite que buscará ser el abanderado.

Para ello, presidió en días pasados una reunión “de unidad”, a la que excluyeron a la diputada federal Miroslava Sánchez,  miembro fundadora del partido del presidente, Andrés Manuel López Obrador en Coahuila y quien posteriormente también reconoció las mismas aspiraciones. De entrada, acusó a Guadiana y demás convocados de ni siquiera ser militantes activos de Morena.

Por el PAN, el panismo de Monclova, único municipio donde el blanquiazul obtuvo buenos resultados en las últimas elecciones, reclama desde ya la dirigencia estatal y exigirá la candidatura a gobernador. El alcalde electo por dicho municipio, Mario Dávila, estuvo recientemente en Torreón para presentar la conferencia “Camino a la victoria”, lo que fue catalogado como parte de una campaña para desbancar a la dupla Guillermo Anaya Llamas-Jesús de León Tello, quienes han dirigido al PAN coahuilense en los últimos años con resultados más negativos que positivos, hasta dejar a dicho partido en tercer lugar en las preferencias del electorado.