¡Parras se está secando!

Sus manantiales se están agotando, mientras un grupo de usuarios se apropian de lo que queda y dejan a otros sin agua

Uno de los íconos de Parras de la Fuente es su famosa acequia, por donde desde hace cientos de años corre agua que es utilizada para la producción agrícola de ejidos y particulares, quienes son dueños en diferentes proporciones de este vital líquido.

La acequia fue alimentada por muchos años por 20 tajos de donde se extraía el agua, sin embargo, en la actualidad, 17 de esos tajos —o manantiales‑ se han secado por completo y solamente en dos continúa brotando agua (el Tajo Seco y el Tajo Zapata) y en uno más, el Tajo Olvera, el agua brota de forma intermitente con un caudal mucho menor al que tenía.

Los tajos en Parras se dividen en dos grupos, unos denominados Aguas Arriba de la Calzada del Márquez y otros denominados Aguas Abajo. Según datos del año 1899, en total los tajos producían 1 mil 041 litros por segundo, que eran suficientes para todos los usuarios. Sin embargo, actualmente los únicos tres tajos que no se han secado producen apenas 399.60 litros por segundo. Es decir, el agua que corre por la acequia de Parras ha disminuido en un 61 por ciento.

Las aguas de los tajos son privadas (pues son anteriores a la Ley Federal de Aguas), tienen varios dueños y se deben tratar como copropiedad, es decir, no son de un solo ejido, de una empresa o de una persona. Hay varios dueños y todos tienen los mismos derechos, aunque la repartición es proporcional en función a los acuerdos establecidos.

A lo largo de la historia de la acequia de Parras, se han firmado distintos acuerdos y convenios, buscando una repartición más justa del vital líquido, de la misma forma se han efectuado ventas, expropiaciones y donaciones, de quienes reciben mayor cantidad hacia quienes se han visto afectados por la disminución del afluente.

Pese a esto, un grupo de usuarios de esta agua, originarios de los ejidos San Francisco y 28 de agosto, decidieron invadir el espacio conocido como Compartidero, ubicado sobre la acequia, a un costado de la Calzada del Marquez, desde el cual se lleva a cabo el reparto entre los diferentes usuarios.

Sin buscar llegar a ningún acuerdo y apoyados por grupos de choque como la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), integrantes del partido Morena y representantes de supuestas asociaciones civiles, esos usuarios de forma ilegal han roto todos los convenios, abriendo las compuertas del compartidero y desviando el agua para ellos las 24 horas al día, pese a que los acuerdos existentes especifican que sus compuertas solo abrirían de 7:00 de la mañana a 3:00 de la tarde, para que después pudieran beneficiarse también los otros propietarios.

De acuerdo a los aforos realizados por la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN) con mediciones hechas entre 2018 y 2019, para comparar la distribución real contra la propiedad establecida, se encontró que de los 11 dueños que actualmente existen, seis estaban recibiendo una menor cantidad de agua.

Entre los afectados se encuentra José Antonio Rivero Larrea, que tiene una propiedad de 6.21 litros por segundo (lps) y ya no recibe ni un solo litro; el ejido San Lorenzo, que pasó de 47.60 lps a 35.87 lps; Fernando Madero Ruiz de 17.96 lps a 8.18 lps; Fernando Martínez González de 17.96 lps a 5.59 lps, y quienes mayor pérdida han tenido: Casa Madero, que de tener derecho a 222.25 litros por segundo solamente recibía 44.63 de acuerdo a la medición, y Lorenzo González y Sucesores, que recibían 40.03 lps de los 141.77 que les corresponden.

En cambio, se beneficiaron algunos usuarios, que reciben mayor cantidad de agua que la que tienen propiedad, entre los que se encuentran el ejido 28 de agosto y San Francisco, quienes reciben 155.66 litros por segundo y solamente tenían derecho de 76.16; el ejido Parras II, que pasó de 47.60 lps a 54.06 lps y el ejido Parras-Fracción Palmeras que pasó de 14.28 lps a 33.55 lps

Para paliar esto y tratar de solucionar la mala distribución, se creo la Unión de Riego Tajos de Aguas de Parras, AC, encabezada por Brandon Milmo, de Casa Madero; Jesús Herrera del Ejido San Lorenzo y José Luis Ovalle del ejido Parras II.

“Son aguas de uso agrícola, no son aguas que surten al municipio, esas las surte SIMAS y son de pozos, estas aguas son de muchos usuarios, de diferentes ejidos. Somos más de 20 usuarios de la asociación, y el problema que existe es que hay menos agua debido a la sobreexplotación de los acuíferos”, señala Brandon Milmo, de Casa Madero, en entrevista con EL HERALDO DE SALTILLO

Esta asociación ha realizado diversos proyectos, entre los que se encuentra la realización del Estudio de Propiedad de las Aguas, y el Acuerdo de Repartición de Aguas, buscando un acuerdo aceptable para todos.

También proponen usar tecnología para la distribución del agua, para realizar aforos automáticos y que el líquido no se reparta por ventanas ni horarios, sino de manera continua.

Pero a estos acuerdos se han negado los usuarios de San Francisco y 28 de agosto, sin presentar la supuesta documentación que alegan tener y buscando politizar el tema, pese a que la Unión de Tajos de Aguas de Parras cuenta con el historial de la propiedad y a que la ley y los usos y costumbres señalan que el agua se debe distribuir proporcionalmente a la propiedad.

 EL COMPARTIDERO

Desde hace unos 25 años, don Bernardino Guillén Elias había fungido como encargado de la distribución del agua en el punto conocido como Compartidero, el hombre se encargaba de abrir y cerrar las pequeñas compuertas de forma manual, dependiendo del horario establecido en acuerdos, para lograr una buena distribución.

Así lo fue hasta que los usuarios de San Francisco y 28 de agosto decidieron invadir el sitio que, además, se encuentra en propiedad privada, alegando en algunas ocasiones ser víctimas de ataques, cuando, en realidad —de acuerdo a varios testigos— son ellos quienes agreden a quienes se acercan a verificar la ilegal acción que realizan.

“Este es el punto de conflicto (El Compartidero) que los usuarios de 28 de agosto y San Francisco tomaron a la fuerza y se están llevando el agua afectando a otros usuarios. Ellos en 2018 invadieron el distribuidor y como ustedes lo ven se están llevando toda el agua, y son otros usuarios los afectados, no solo es Casa Madero, lo único que pedimos es que se respete la ley y los derechos de los demás, que se respete el agua de acuerdo a la Ley”, dice Brandon Milmo.

EL HERALDO DE SALTILLO logró ingresar custodiado a el Compartidero, para verificar las acciones realizadas por los usuarios de San Francisco y 28 de agosto.

En el lugar, Casa Madero —legítimos dueños de la propiedad dónde se ubica el Compartidero— ha puesto un par de guardias de seguridad, para vigilar las acciones de los usuarios invasores, sin embargo, estos últimos no permiten que las compuertas del Compartidero se abran y cierren como en el pasado, sino que envían el agua hacia su caudal las 24 horas al día y los demás propietarios deben esperar a que la corriente se eleve más para que algo de agua llegue hasta sus terrenos.

Esto ha provocado, entre otras pérdidas, que varias de las nogaleras ubicadas en el acceso a Parras de la Fuente se estén secando, ante la falta del vital líquido.

“Desgraciadamente se vino este problema con estos señores, que vinieron aquí los de San Francisco y el 28 y ellos dicen tener el documento que ampara la propiedad, pero personalmente no he visto ningún documento, a pesar de que se les ha solicitado. Ellos no han sido del todo honestos”, señala Jesús Herrera, presidente del comisariado ejidal del Ejido San Lorenzo.

“Nomás queremos que se demuestre la propiedad. No se pretende a nadie despojar del agua siempre y cuando tenga un real derecho, de lo contrario vamos a caer en pleitos y mucha gente está deseando que suceda para perturbar este asunto”, agrega.

Los usuarios invasores se han negado a presentarse en las mesas de diálogo convocadas por el Gobierno del Estado, buscando lograr un acuerdo equitativo para todos, sin importarles las afectaciones que provocan a otros propietarios.

Por lo que todo parece indicar que este conflicto tendrá que ser solucionado por la vía legal, ya que de parte de los usuarios invasores no hay intención de llegar a un acuerdo y ni siquiera de sentarse a dialogar.

“Estamos buscando un nuevo acuerdo, desgraciadamente los usuarios de 28 de agosto y San Francisco se han salido de todas las negociaciones”, agrega el presidente de la Unión de Riego Tajos de Aguas de Parras.

Por lo pronto, grandes extensiones de nogales centenarios se están secando, otros ejidos como el Parras, Parras II y el San Lorenzo están sufriendo por falta de agua, y existe el riesgo de que los viñedos de Casa Madero y otras empresas vitivinícolas se puedan secar también, lo cual seria una auténtica tragedia para Parras de la Fuente y para todo Coahuila. (JOSÉ TORRES | EL HERALDO)