Cesar Alonso Valdés: forjador de talentos saltillenses

El joven se dedica a promover el teatro en niños y jóvenes en nuestra ciudad

En 2008, cuando tenía 18 años, Cesar Alonso Valdés descubrió su pasión por hacer teatro ya que estudiando su último año de preparatoria en el Colegio Ignacio Zaragoza de Saltillo dirigió «Había una Vez», musical de su autoría en el que participaron alrededor de 300 alumnos desde preescolar hasta bachillerato de esta institución.

«Me dije ‘esto me encantó, aquí hay algo que es para mí’. Dirigí todo, lo escénico, el diseño de vestuario, el diseño de iluminación. Llevaba también logística y producción», compartió con EL HERALDO.

Deseoso de continuar en este rubro, Cesar se mudó en 2013 a Los Ángeles, California para tomar algunos diplomados y cursos en artes escénicas dentro de Los Angeles Valley College.

Un año más tarde su esfuerzo rendiría frutos ya que fue invitado para encabezar la Compañía de Teatro Musical de la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C), proyecto del que estuvo al frente por cuatro años.

Asimismo, en 2015 su obra «Un Extraño Sueño», que retrata leyendas saltillenses adaptadas al público infantil, fue seleccionada para representar a Coahuila en la Muestra Nacional de Teatro Para Niños.

«Se forma el primer grupo de la compañía Talento y que este el que obtiene la representación para irnos en febrero del 2015 a la ciudad de Tabasco, a conocer muchos niños y llevar la obra», recordó.

Su formación profesional continuó en 2017 cuando se acreditó como director de teatro musical bajo el aval de Broadway Teaching Group, institución de formación artística con sede en Nueva York.

«Yo ya había estado haciendo teatro universitario y la verdad es que me había enamorado del teatro musical y cuando me fui a preparar tuve esta retroalimentación con musicales de Broadway que tenía oportunidad de ver, de alguna manera me inspiraron para decir ‘yo quiero hacer esto'», externó.

INSPIRAR PARA ACTUAR

Fue hace siete años que, con el sueño de sembrar la semilla de la actuación en la capital coahuilense, el joven de 30 años creó el grupo de «Teatro para Niños Talento», desde el que ha formado y dirigido a alrededor de mil 500 niños y jóvenes dentro de 35 producciones.

«Encontré en los niños y en los jóvenes un complemento de mí mismo como artista. Tenía la oportunidad de ver en ellos todas mis creaciones e ideas que yo tenía, además de su talento y sus ganas que me inspiraban mucho. A raíz de esto empiezo a escribir más y buscar más proyectos para los niños y jóvenes», platicó.

«Talento ha sido una compañía que durante los últimos siete años no ha parado. Con niños y jóvenes hemos podido realizar 35 proyectos. Para mí ha sido una gran responsabilidad inculcarles la disciplina, la constancia, la responsabilidad que conlleva hacer teatro. He tratado siempre de dejar en ellos esta semilla de amar el teatro y amar lo que haces», ahondó.

 

HASTA TEXAS

El alcance de «Talento» rebasó fronteras cuando en 2019 seis de sus integrantes viajaron a Austin, Texas para presentar «Un Extraño Sueño» en el Vortex Theatre de esa ciudad estadounidense.

«Recibimos una invitación por parte de la Asociación de Ciudades Hermanas de Austin para llevar una obra que representara la cultura coahuilense. Ha sido un gran logro pasar a otro país, el poder compartir esta historia, poder llevar nuestro talento. Eso me dio mucho gusto», remarcó.

Asimismo, adelantó que en octubre de 2021 otra de sus obras titulada «Mis Niñas Migrantes» se mostrará en el Festival Internacional Cervantino de Guanajuato, ya que formará parte de la oferta cultural que presentará Coahuila en esta importante plataforma como estado invitado.

 

TEATRO CON ESPÍRITU SOCIAL

Para el también licenciado en Diseño Gráfico por la Universidad Autónoma de Coahuila (UA de C) y director de la Compañía de Teatro Musical en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM) Campus Saltillo, el teatro debe mostrar problemáticas sociales para que el espectador concientice sobre su impacto y busque generar un cambio positivo en su entorno.

«Es algo mágico, yo estoy enamorado del teatro. Me parece que es una oportunidad de contarle al público una historia que puede cambiarte la vida, porque tienes la oportunidad de poner en el escenario todo, desde un mensaje que puede llegar a tener un gran impacto hasta miles de emociones que pueden transmitirle al espectador», consideró.

«A mí me gusta siempre buscar una temática social, alguna problemática o algo que no sea muy común. Siempre veo que la sociedad nos da estos temas tan ricos que son historias y con los cuales casi siempre tengo una conexión para decir ‘¿Por qué no hablamos de esto en el escenario?», finalizó. (OMAR SOTO / EL HERALDO)