DESDE MI ESCRITORIO

La importancia de vacunarse y usar el cubrebocas 

En varios sectores de la comunidad he escuchado que varias personas están renuentes en aplicarse alguna vacuna contra la Covid 19, como diría en alguna ocasión el afamado entrenador de fútbol, originario de la extinta Yugoslavia —hoy Serbia— Bora Milutinovic, “Yo respeto”, aquí agregaría, “la decisión de cualquier persona”, pero a raíz de esto, me puse a consultar con varios especialistas la importancia de vacunarse y a la vez, el seguir usando el cubrebocas.

Los especialistas en infectología y salud pública, comentan que las vacunas generan una respuesta inmunológica en las personas que son inoculadas. En este caso, buscan formar anticuerpos que son capaces de neutralizar el virus y también la inmunidad celular. Logran en nuestro sistema inmune células que “recuerdan” al virus, y en el caso de que nos expongamos a él, se genera una respuesta rápida de defensa para evitar el contagio.

Las vacunas contra la Covid-19 evitan que las personas se enfermen gravemente o mueran de la enfermedad. Es cierto que muchas personas que se enferman con el covid-19 solo tienen síntomas leves. Pero este virus es realmente impredecible.

Algunas personas pueden enfermarse o morir de covid-19, incluso los jóvenes sin trastornos de salud crónicos. Otras personas, conocidas como “los enfermos a largo plazo”, pueden tener síntomas que duran meses y afectan su calidad de vida. Y todavía no conocemos todos los efectos a largo plazo del Covid-19 porque es un virus muy reciente.

Los médicos destacan que todavía no se sabe si alguien que se contagia con la Covid-19 tendrá síntomas leves o se enfermará gravemente. Lo que si es que, entre más personas reciban la vacuna, más se acercarán a la inmunidad de la comunidad.

La inmunidad comunitaria impide que el virus se propague y protege a las personas que no pueden recibir la vacuna por razones médicas.

La vacuna es una forma más de protegernos. 

Los especialistas insisten que si una persona enferma de Covid, la vacuna reduce las formas graves de la enfermedad y al estar vacunado se protege a la familia y a los que te rodean compañeros de escuela, trabajo, amigos.

Estar vacunados no significa que no debemos seguir llevando a cabo las medidas de protección. Las vacunas no actúan como un escudo que impide que nos contagiemos. Son una herramienta que nos permite defendernos de mejor manera si contraemos el virus.

Lo que se espera de una vacuna administrada en una o dos dosis, no es que impida la infección. Si bien en algunos casos podría pasar, lo que evita, comentan, es que se presenten formas graves o severas de la enfermedad. Además, hay que considerar que, para que una persona se considere protegida, deben pasar 14 días desde la colocación de la segunda dosis.

Por lo tanto, es una irresponsabilidad pensar que, porque alguien está vacunado, ya no tiene que usar mascarillas o dejar de respetar el distanciamiento social.

Debemos de recordar que el uso correcto del cubrebocas, debe cubrir nariz y boca para evitar contagios por enfermedades respiratorias, lo que hace es proteger en un gran porcentaje que la persona enferma no transmita la enfermedad ni permita la salida de secreciones, pero si una persona enferma no utilizo cubrebocas y una persona sana sí hace uso del mismo, la eficiencia baja hasta un 20 por ciento, pero si ambas personas, enferma y sana, usan cubrebocas esa efectividad aumenta hasta en un 80 por ciento de protección.

Sigamos usando el cubrebocas.

Punto y aparte

La consulta popular del próximo 1 de agosto que someterá al voto popular el ejercicio de la justicia, se considera como un teatro impulsado por el presidente López Obrador como una parodia política. Algunos comunicadores en el país, incluso, han pedido no acudir a las urnas el próximo domingo.

Por ejemplo, el analista Carlos Elizondo ha propuesto no distraerse más con el pobre espectáculo: “Hoy tendríamos que estar discutiendo tantos otros temas urgentes, desde el retraso en la vacunación hasta la estrategia de seguridad. Le sugiero no pierda su tiempo el domingo entrante yendo a votar”.

Los resultados de la consulta serán vinculatorios para los Poderes Legislativo y Ejecutivo sólo si participa el 40 por ciento de los ciudadanos inscritos en la Lista Nominal de Electores. Si no se alcanza ese porcentaje, la consulta no tendrá valor alguno ni servirá de nada.

Recurrir al voto popular para establecer si se procesa o no a alguien o para decidir si es necesario combatir la corrupción y encarcelar a los corruptos es un despropósito, una comedia barata. Que la consulta no nos distraiga.

Ahora no hay frase, está este pensamiento: “De niños recordamos quien estuvo con nosotros, no quien gastó más en nosotros. Crecemos y olvidamos los juguetes y regalos, pero no olvidamos el tiempo y el amor. Padres no sólo hagan cosas por sus hijos, sino hagan cosas CON sus hijos.” Daniel Habif.

Agradezco la oportunidad que me da el periódico el Heraldo de Saltillo, por participar en su espacio editorial. Gracias Paco, aquí nos veremos cada viernes, desde mi escritorio.

Ánimo.

Twitter:_hreyes