EL CUARTO DE TULA: CANDELA SOCIAL EN CUBA

 

Primero de enero de 1959, La Habana, Cuba, Fulgencio Batista dimite como presidente, y con ello triunfa la Revolución comandada por Fidel Castro. Desde ese momento hasta la fecha, se establece el gobierno comunista que ha ocasionado 62 años de una dictadura cuyo sello son un férreo control estatal y carencias.

Cuando se vive en estas condiciones hay pocas opciones. Emigrar, so pena de ser considerado un “desertor” y perder derechos los ciudadanos. Protestar, so pena de ser fichado por el aparato de inteligencia del Estado, el cual es altamente eficiente. O mantener el status quo con la dieta del agua y el ajo: aguantarse y ajoderse.

Esta ha sido la situación cubana por décadas, pero ahora han estallado las protestas de manera simultánea en varias ciudades de Cuba. Pero ¿por qué ahora están tomando más fuerza? En síntesis: por el COVID-19. La pandemia ha acelerado la crisis económica de la isla ocasionando más escasez de alimentos y medicinas. Además, del repunte en contagios, ante el cual solo el 18% de la población está completamente vacunada.

El gobierno cubano ha seguido la sempiterna excusa para justificar la realidad: el embargo del imperialismo yanqui. Ha dicho que los reportes de la prensa que el mundo está viendo sobre las protestas y la vida en Cuba es una mentira, y ha prometido ablandar un poco las medidas de importación de alimentos y medicinas, así como las restricciones a las empresas para fijar salarios. ¡Vaya concesión!

La gente se está organizando al grito de “¡Libertad, libertad!” a pesar de los cortes al servicio de telefonía fija y celular. El gobierno cubano cree que cortando el Internet apagan el descontento social de décadas. Ternuritas, como si la Revolución Cubana se hubiera organizado a través de un chat de Whatsapp.

Además, han aprehendido a varios líderes sociales y activistas, lo cual puede desencadenar más protestas, como las que ocurren afuera de las comisarías de policía donde familiares buscan a los detenidos. Y por si fuera poco, el presidente Miguel Díaz-Canel ha hecho un llamado a los comités de defensa de la revolución a salir a las calles y mostrar su apoyo al gobierno. Algunos saldrán más a fuerza que de ganas, porque hay una realidad clara: Díaz-Canel no inspira igual que los Castro.

En los próximos días veremos una lucha de comunicación y censura que está escalando a nivel internacional, porque a pesar de que el gobierno está minimizando las protestas, Cuba ya está en las mesas de conversación a nivel internacional. Como dijo el gran Compay Segundo en una de sus canciones: “El cuarto de Tula, le cogió candela se quedó dormida y no apagó la vela”.

 

Israel Navarro es Estratega Político del Instituto de Artes y Oficios en Comunicación Estratégica. Twitter @navarroisrael