“Bartlett y la CFE conocían bien la inseguridad en la mina”, reitera OFPC

Foto: INFONOR

Rancherías, Municipio de Múzquiz. – En un intento por eludir la responsabilidad de la Comisión Federal de Electricidad en el siniestro de la cueva de la empresa Micarám en Rancherías, la paraestatal emitió “nota informativa” en que asegura que no compra carbón de ese yacimiento y que Manuel Bartlett Díaz, su director, no estaba enterado de las condiciones de inseguridad en las minas a las que adjudicaron contratos.

Fechada 5 de junio, la nota textualmente refiere: “La Comisión Federal de Electricidad desmiente categóricamente que la mina donde ocurrió el lamentable accidente en Coahuila sea proveedora de la CFE, en consecuencia, era imposible que su director estuviera enterado del estado de la mina”.

La firma Luis Bravo Navarro, coordinador de Comunicación Corporativa, y agrega: “Lamentamos lo sucedido y expresamos nuestra solidaridad a los familiares”.

Al respecto, la Organización Familia Pasta de Conchos (OFPC) reiteró que Manuel Bartlett estaba perfectamente enterado de la situación, dado que han denunciado en diferentes ocasiones las deplorables condiciones en que se encuentra muchas de las cuevas y pozos, además de que se le entregó en propia mano una carta conjunta con el Centro Miguel Agustín Pro de Derechos Humanos advirtiendo los riesgos e incluyendo fotos precisamente de la cueva siniestrada.

“No puede negarlo, una de nuestras integrantes le entregó en su mano la información el pasado 23 de octubre de 2020, durante la visita que junto al presidente de la República hizo a la mina Pasta de Conchos; tras eso, hemos pedido insistentemente una reunión con él, para ampliar la información, y se ha negado”, afirmó Cristina Auerbach, quien entregó copia de la misiva dirigida a Bartlett.

Esta es la carta que la Organización Familia Pasta de Conchos entregó en octubre a Manuel Bartlett.

A la vez, productores carboneros de la zona reiteraron que, si bien Micarám no recibió directamente pedido de la CFE, el carbón que extrae lo entregan a las termoeléctricas de Nava a través del contrato que se otorgó a la empresa Carkim Industrial, propiedad del mismo Eduardo Rubén Morales y que opera otras minas en la zona.

“En este caso es autocoyoteo y aquí todos lo sabemos, porque es una práctica general desde hace muchos años que realizan las empresas que han sido sancionadas o quedan fuera de los pedidos, y le venden a otros o inventan empresas que ni minas tienen”, precisaron. (FÉLIX RODRÍGUEZ | INFONOR)