Cómo influye el ruido en el sueño

 

No poder dormir a causa del ruido es algo que, si lo sufres, sabrás lo mucho que influye al día siguiente.  Si además el ruido es algo constante cada noche, tu día a día se ve afectado porque el sueño es tan importante para el bienestar como una adecuada alimentación, un estilo de vida saludable y las relaciones afectivas positivas.

Son muchos los tipos de ruidos que hacen difícil o imposible un buen descanso. Algunos son inevitables, como el ruido ambiental constante de la ciudad. Otros, sin embargo, pueden tener solución con pequeños cambios en tus hábitos.

Veamos cuáles son los ruidos que más afectan a la calidad del sueño:

LA CIUDAD NUNCA DUERME

Este dicho no va nada desencaminado, ya que cualquier habitante de una gran ciudad que se va a pasar un fin de semana al campo se da cuenta de que duerme mucho mejor. El motivo es que, por supuesto, el silencio nocturno calma la mente y permite un sueño profundo y reparador.

Sin embargo, quienes viven en una urbe están inevitablemente a merced de la contaminación acústica. Y no solo por la noche, sino las 24 horas. En las poblaciones de gran tamaño hay un ruido ambiental constante que parece imperceptible, y que es resultado de la gran cantidad de energía que se necesita para abastecer de electricidad a millones de hogares y establecimientos. Además, el exceso de ruido provocado por el no parar de coches, autobuses y gente por todas partes durante el día hace que cuando llega la noche sea difícil relajarse y conciliar el sueño. ¿La solución? Si realmente te gusta vivir en una ciudad es muy aconsejable que, siempre que puedas, te escapes de las masificaciones y disfrutes de la naturaleza, en vez de meterte en un centro comercial o salir de fiesta cada fin de semana.

Si vives en una calle muy transitada tanto por el día como por la noche, lo mejor es que te acostumbres a dormir con tapones para el ruido, que al menos te permitirán unas horas de desconexión del alboroto urbano.

MI PAREJA RONCA

Las personas que roncan no pueden evitar hacerlo, obviamente porque están dormidas. Es cierto que en algunos casos los ronquidos están provocados por el consumo de tabaco, el exceso de alcohol o el sobrepeso, pero muchas veces no tienen una causa clara. Si te cuidas, pero aun así roncas, no está de más que pruebes con esas tiritas para respirar o con un spray para no roncar que venden en las farmacias, y que a veces dan resultado. Si has probado de todo y nada te funciona, la mejor opción es acudir al/la otorrinolaringólogo/a.

Si es tu pareja la que ronca y ya ha probado todo o anterior, los tapones para los oídos pueden ser un buen remedio para poder descansar toda la noche sin despertarte por los ronquidos. Irte a otra habitación también es una solución si no puedes más, pero si para ti dormir juntos es un vínculo íntimo al que no quieres renunciar, prueba primero la opción de los tapones. Puede que al principio te resulten incómodos, pero en pocos días te acostumbrarás.

VER LA TELEVISIÓN ANTES DE DORMIR

Mucha gente dice que ver la tele en la cama le ayuda a dormir. Es posible, pero eso no quiere decir que le ayude a dormir bien. El ruido de la televisión o del ordenador no permite el momento de silencio que el cerebro necesita por la noche para relajarse del todo, y puede provocar que las primeras fases de sueño no se produzcan correctamente. Si quieres desconectar del día para conciliar el sueño, un buen libro es la mejor opción. Lo mismo sucede con la radio, que algunas personas dejan puesta toda la noche. Tal vez ayude a olvidarse del estrés del día, pero no deja de ser un estímulo acústico externo que no permite el silencio total que se necesita para un descanso realmente reparador.