EN EL TINTERO

¿Victimaria?

Sororidad es la palabra que obviamente no está en el vocabulario de una de las diputadas federales por Coahuila, hablamos de Melba Farías Zambrano que, a decir de la propia afectada, se ha convertido en una “victimaria, corrupta y ratera”.

Así lo expresó literal, Angélica Ledezma, abanderada del Partido del Trabajo y suplente de la legisladora de Morena, quien, en un intento de mantener los privilegios económicos de la curul, tras solicitar licencia, exigió a su compañera que le entregara el 50 por ciento de la dieta.

Debido a que no logró su cometido, optó por acudir a la Cámara de Diputados para inventar que Angélica había fallecido y con ello evitar que asumiera el cargo. Lo que vino después, fue una serie de daño emocional para la familia de la petista que comenzó a recibir condolencias y mensajes de dolor por la presunta muerte de Angélica, quien expresa, y no es para menos, que todo aquello fue un infierno.

Melba buscaba ser la candidata a la alcaldía de Monclova, pero al ver las pocas posibilidades negoció una posible reelección a la diputación federal, con lo cual podía seguir recibiendo recursos, por lo que decidió volver a la curul.

Lo más lamentable es que la diputada es integrante de la Comisión de Igualdad y Género en la Cámara de Diputados, pero independientemente de eso, es representante de todos los coahuilenses y, ya lo vimos, capaz de “matar” a su propia compañera para no perder el hueso político.

Varios son los indicios que demuestran que este partido político ha sido apático y violento con las causas, pues no muy lejos ha impulsado la candidatura de Félix Salgado Macedonio a la gubernatura de Guerrero, pese al movimiento social nacional que cuestionó y criticó esta decisión de Morena, al postular un perfil acusado de acoso y abuso sexual.

Casos como el de Melba preocupan, pues este tipo de personas sin ninguna calidad moral, son quienes nos representan en el Poder Legislativo y, al ser mayoría, tienen en sus manos las decisiones del país.

En el tema de Félix Salgado es simple, un partido lo postula, pero esta en manos de los ciudadanos permitir o no que llegue al poder. Lo más triste es que hay una preocupación de que como sociedad no reflexionemos el voto y sigamos llevando a este tipo de personajes a gobernar, pues aunque en este momento el INE limita su candidatura, es importante preguntarnos si los ciudadanos le brindarían su apoyo en las urnas.

Hoy más que nunca es importante reflexionar el voto, en un país donde crece la violencia de género y el número de feminicidios, en donde sin importar los agravios, el partido en el poder desacredita las causas e impulsa perfiles deshonestos.

Luego de todas esas manifestaciones en la calle y en las redes sociales ¿Llevarán las mujeres su voz a las urnas? ¿Actuarán los ciudadanos cansados de una mala economía? ¿Cómo evaluará esta vez la sociedad a sus gobiernos? Esperemos que con un voto razonado, pues en manos de la población está el evitar que personajes como estos lleguen a los espacios de poder.