La travesía de una madre para dar el último adiós a su hija 

María se encontraba en Saltillo cuando se enteró de la muerte de Mariana

Alrededor de las 7:00 de la mañana del 28 de enero de este año, el cuerpo sin vida de la doctora Mariana Sánchez Dávalos fue encontrado colgado con una soga al interior de una habitación contigua a la Clínica de Nueva Palestina, en Ocosingo, Chiapas, a la que llegó en agosto del 2020 para realizar sus prácticas profesionales, siendo asfixia secundaria por ahorcamiento la causa de su deceso.

En esa misma fecha, María de Lourdes Dávalos Ábrego, su madre, se encontraba en Saltillo laborando en la empresa Mabe, cuando recibió la fatal noticia de que su hija había muerto.

«La mañana del jueves 28 de enero, una amiga muy cercana a mi hija me preguntó si yo estaba bien y me extrañó mucho esa pregunta porque algo malo presentí. Me pregunta si sabía algo de mi hija y le digo que no; le pregunté que qué había sucedido y me dijo ´estoy en una junta, ahorita saliendo te llamo´. Me imaginé lo peor, entonces ya después que contacto de nuevo a esta amiga, le pregunté si había pasado lo peor y me dijo que sí, fue el peor momento que me ha pasado en la vida», comentó para EL HERALDO, María de Lourdes Dávalos Ábrego.

Horas después, gracias al apoyo de sus conocidos, consiguió un vuelo desde Monterrey para arribar a Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Luego de varios inconvenientes llegó el jueves a medianoche.

«Fue un viaje con muchos obstáculos. Un amigo me llevó a la terminal de autobuses pero viendo que ya disponía de poco tiempo para estar en el aeropuerto tomé un taxi particular que me llevó a Monterrey pero a mitad del camino estaban arreglando la carretera y tuvimos que buscar atajos, tomar la carretera a Nuevo Laredo, viendo cómo podíamos llegar lo más pronto posible al aeropuerto, donde me dicen que la compra del boleto tenía un error y que no era válido», indicó.

«Me inquietaba mucho que reservaran mi lugar. Después tuve que acudir a otro mostrador y hacer otras cosas, el caso es que compré el boleto para trasladarme a México y transbordar a Chiapas. Me apoyaron muchas amistades, llegaron por mí al aeropuerto», narró.

Tras su arribo a Chiapas, familiares le mostraron múltiples publicaciones en redes sociales, en las que se especulaba que Mariana, de 24 años, se había suicidado. Un día después, el cuerpo de la joven fue trasladada de Ocosingo a Palenque y ya en Tuxtla, su madre apenas tuvo unos minutos para despedirse de ella.

«Trajeron a mi hija ya tarde, todo fue rapidísimo. Apenas tuve tiempo para despedirme de ella, fue demasiado rápido, unos veinte minutos; me decían que ya se la tenían que llevar. Tenían que desalojar el velatorio, la llevaron a un crematorio, que la tenían que llevar rapidísimo», externó.

«Traté de alcanzarla a donde la iban llevar, no la alcancé. Me dijeron que la metieron inmediatamente. Fue demasiado movimiento», agregó.

 

PIDE JUSTICIA

Pese a que la Fiscalía de Chiapas calificó su deceso como suicidio, María de Lourdes descartó este hecho al sospechar que el responsable de la muerte de Mariana podría ser uno de sus compañeros, Fernando Cuauhtémoc, quien desde noviembre del 2020 comenzó a acosarla, lo que derivó en que ella interpusiera una queja ante Analí «N», directora de la Clínica, misma que fue ignorada por la mujer que a principios de febrero fue aprehendida por el delito de abuso de autoridad.

A lo anterior, se sumó la denuncia formal que su hija interpuso por acoso sexual en contra de Fernando Cuauhtémoc ante el Ministerio Público y un reporte a la Secretaría de Salud; el primer organismo mostró indiferencia mientras que el segundo se limitó a ofrecerle un mes de vacaciones.

«En un principio me dijeron que había sido suicidio. Ya cuando acudí a las redes sociales me mostraron que no había sucedido eso sino que lo había provocado. Yo había hablado con ella una tarde antes, era imposible que se hubiera hecho algo. En cuanto me comentaron que ella había hecho algo así, me dije ´esto es imposible´», mencionó.

Al darse a conocer su caso a nivel nacional y ante el llamado de personal médico y activistas en defensa de la mujer, la citada Fiscalía reabrió la carpeta de investigación por tratarse de un probable feminicidio, esto dio pie a que, el 18 de febrero, Fernando Cuauhtémoc se entregara a las autoridades para enfrentar las acusaciones. Ya se encuentra en prisión preventiva.

Cabe destacar que el abogado que lleva el caso de Mariana manifestó haber encontrado irregularidades en el caso como manipulación de pruebas en el hallazgo del cuerpo y que intervinieron el teléfono de la víctima.

«Lo que yo he estado exigiendo es que se haga justicia con los responsables porque hay muchos responsables, tenían la obligación de cuidarla y por cómo se manejan las cosas en la Secretaría de Salud le dieron una total indiferencia», aseveró.

 

SUEÑO TRUNCADO 

María recordó que su hija, quien estudió médico cirujano en la Universidad Autónoma de Chiapas, pasó su último año de estudios en Monterrey, Nuevo León y tenía entre sus opciones establecerse en la capital coahuilense, a su lado.

«Estábamos cerca, yo la visitaba, ella me visitaba. Ella quería seguir haciendo su servicio en Monterrey o en Saltillo. En Saltillo la apoyaron, le dijeron que era posible pero en la Universidad dijo que tenía que hacerlo aquí (en Chiapas). Ella no quería estar allá, de hecho tenía planes de hacer su especialidad en Monterrey. Lo último que le dije fue que íbamos a seguir buscando para lograr que la reubicaran», puntualizó. (OMAR SOTO / EL HERALDO)