A LA BÁSCULA

Ollas en la lumbre 

No sé si en los hechos en este momento, pueda ser aplicado a pie juntillas lo dicho en su momento por el Presidente, acerca de que esta pandemia, a su gobierno, le ha caído ‘como anillo al dedo’, como no sea porque se convertirá al tiempo en el principal argumento que habrán de esgrimir para justificar muchas de las acciones emprendidas por este gobierno. Pero aun así, no estoy muy cierto de que les sirva al grado tal de poder sostener que la crisis sanitaria les cayó ‘como anillo al dedo’.

Lo quieran o no reconocer en la autoproclamada ‘Cuarta Transformación’, el tema de la pandemia se les ha salido de control, mucho más allá de lo que ellos mismos se lo imaginaron cuanto todo esto comenzó, y que ya contabilizamos muchos, pero muchísimos más muertos de los pronosticados por el ‘Zar anticovid’, Hugo López Gatell, que el 4 de mayo dijo que el Coronavirus podría producir en México como máximo unos 30 mil fallecimientos, y fue cuando nos dibujó su ‘escenario catastrófico’, en el que se podrían alcanzar 60 mil muertes.

Para ser más exactos hasta la tarde-noche del miércoles la Secretaría de Salud reportó 161 mil 240 decesos, es decir ‘nadamás’ arriba de 101 mil más de las que nos dijeron que solamente ocurriría en un escenario ‘verdaderamente catastrófico’. Y como consecuencia de una cadena de irresponsabilidades y errores cometidos desde el primer mandatario y todo su equipo de colaboradores, con mayor énfasis los del área de salud, el Presidente terminó por pasar a formar parte de las estadísticas de los contagios en nuestro país.

Como si eso no fuera suficiente, el manejo de las vacunas –las reales y las hipotéticas- ha sido desastroso, y más lo ha sido el lanzamiento de la página mivacuna.salud.gob.mx a través de la cual se habría de llevar a cabo el registro de los adultos mayores de 60 años que deseaban ser incluidos en los listados de quienes recibirán la vacuna, una vez que ésta se encuentre disponible en nuestro país. De acuerdo con los resultados del más reciente Censo dados a conocer apenas a finales de enero, en nuestro país hay un total de 12 millones de personas dentro de ese rango de edad.

Por principio de cuentas, la vacuna ni siquiera está disponible en México en este momento como para la urgencia de convocar a 12 millones de mexicanos o sus familias a ingresar a la página al mismo tiempo, lo que provocó, como era normal que sucediera, que la página colapsara, porque nadie tomó las previsiones del caso.

Digo, si no hay las cantidades de vacuna en estos momentos, bien pudieron haber planificado el lanzamiento de la página de mivacuna, segmentando a la población mayor de 60 años, quizá por los rangos de edad que maneja el INEGI, por ejemplo, el de 60 a 64 años, que registra 1.8 millones de varones y 2.0 de mujeres, y luego irse sucesivamente por fechas y rangos, o bien, haberlo hecho por grupos cuyos apellidos iniciaran con determinadas letras. Cualquier método hubiera sido mejor que dejar abierto a toda la población el ingreso a la página. Era obvio que, con esa estrategia, ésta colapsara como sucedió en las primeras horas que se hizo su lanzamiento.

Pero como si los problemas del día a día no fueran suficientes para este país, todavía encima le atizan más leña al fuego, con un par de temas que, si los llegan a concretar sólo porque tienen la mayoría en el Congreso, le van a acarrear al país serios y graves problemas, como la pretendida reforma a la Ley del Banco de México (Banxico) que podría convertir a nuestro país en un paraíso fiscal, donde el narco podría trabajar y lavar a sus anchas, todo el dinero que se les antoje.

Pretenden también la modificación a la Reforma Energética, que privilegia -contrario a como se opera a nivel mundial- comprar la energía eléctrica que produzca la Comisión Federal de Electricidad, aunque esta sea la más cara y contaminante. En todo el mundo, primero se compra la de menor costo y que utiliza procesos limpios, y al final los más caros y contaminantes. Pero México, ya sabemos, es el mundo del revés.

La ‘empresa de clase mundial’, por los pantalones del Presidente, nuevamente acaba de condonar a los habitantes de Tabasco, un monto total de 11 mil millones de pesos por adeudos históricos en el pago de la energía eléctrica ¿Y qué cree? Que esa cantidad que el primer mandatario perdona a sus paisanos, la vamos a pagar el resto, usted, yo y todos los demás mexicanos.

La mayoría de ellas de forma innecesaria, pero la autoproclamada 4T solita ha ido colocando demasiadas ollas en la lumbre, y como es lógico, algunos de esos guisos, terminarán quemándoseles. Al tiempo.

 

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@JulianParraIba