UA DE C: LIDERAZGO LATENTE

Para el Ingeniero Jesús Salvador Hernández Vélez, candidato a Rector de la Universidad Autónoma de Coahuila, con el voto de confianza ganado por su liderazgo. El 11 de febrero, esto se verá reflejado.

Lo que en principio parecía un proceso meramente temporal, no fue realmente dimensionado y en la actualidad nos encontramos en un contexto que en lugar de parecer que cuenta con un próximo final, tiene una apariencia de prolongación importante en el tiempo.

Multicitada ha sido la afectación generada por la pandemia y sin duda alguna la parte más sensible es la afectación en la salud de las personas que ha trascendido incluso en decesos y sufrimiento para muchas familias, en el mundo y en nuestro país.

Otro de los factores a considerar, también ya referido por el autor de estas líneas, es la afectación de carácter emocional que genera en las personas por el simple hecho de sentirse en peligro y en los peores casos por estar afectados o tener seres queridos que hayan sido vulnerados por esta terrible enfermedad.

Es ahí donde se debe considerar sin duda alguna, al sistema educativo en el nivel superior, ya que la capacidad socioeconómica y en todos los sentidos de la mayor parte de la población, es limitada. Esto se traduce en un reto importante para las instituciones de educación superior, que derivado de las políticas públicas establecidas desde el gobierno federal, han visto mermadas de manera notoria sus finanzas, por ello la problemática se acentúa.

Uno de los referentes a nivel nacional, para propios y extraños, qué es la Universidad Autónoma de Coahuila, que desde la gestión del ingeniero Salvador Hernández Vélez, ha iniciado un proceso de modernización que ha colocado a la misma Universidad en condiciones más favorables qué otras instituciones educativas, en relación a esta pandemia.

Medidas ejemplares; como el reglamento de austeridad y el reforzamiento de la plataforma teams, tomadas mucho antes de que se supiera a nivel mundial de la existencia del virus, hicieron transitar a la Autónoma de Coahuila hace un modelo de modernización.

Sin duda también es evidente el esfuerzo de naturaleza jurídica, al actualizar el marco normativo a las condiciones de este milenio, en un proceso titánico nunca antes visto, el ingeniero Hernández Vélez, encabezó los trabajos para realizar una amplia e informada consulta en los sectores universitarios involucrados en los procesos educativos, derivado de la misma, se realizó modificación sustancial al Estatuto Universitario, qué es la norma base del alma Mater de Coahuila, enfoques de actualización tecnológica, respeto a los derechos humanos y modernización educativa, nutrieron esta norma y permiten a la Universidad Autónoma de Coahuila trabajar no solamente de hecho, si no apegada a derecho.

Notorios son los esmeros de las Escuelas,  Facultades e Institutos que componen a la Universidad, y sin duda alguna también de las dependencias que forman parte de su organigrama, es gratamente satisfactorio  notar que en la Universidad Autónoma de Coahuila, existe una conciencia real de esta llamada nueva normalidad.

Hay que reconocer sin empacho, que este proceso es un esfuerzo conjunto, pero también, que como ya se mencionó, ese liderazgo, lo que facilita estos logros anteriormente citados. Siempre existirán áreas de oportunidad en cualquier circunstancia, lo que demuestra la Universidad Autónoma de Coahuila, es un amplio nivel de sensibilidad ante las condiciones que prevalecen en la actualidad y se proyectan para permanecer durante un amplio tiempo.

Pese a todas las posibilidades de mejora, de las cuales los universitarios somos conscientes, es de reconocerse la gran labor que representan cuando menos dos grandes retos de las universidades públicas en nuestro país. El primero ya ha reiterado, es la notoria crisis económica a nivel nacional y mundial, y el segundo también ya reseñado, la existencia de una pandemia que está mermando en muchísimos campos de manera profunda.

El liderazgo implica ejemplo, y sin duda en ingeniero Hernández Vélez ha dado nuestras plausibles de qué se pueden optimizar recursos en todos los sentidos y se pueden generar relaciones respetuosas entre los universitarios, existe una amplia disposición para seguir mejorando los espacios educativos en lo físico,  tecnológico y en el día a día.

Los primeros tres años de gestión del Ingeniero Hernández Vélez, (hombre que lee mucho y escribe más; y que impulsa la ciencia y le respeto al medioambiente) han demostrado una apertura total al diálogo y las opiniones francas y abiertas de la comunidad universitaria.

En la humilde experiencia el suscrito, cuatro veces egresado de la Universidad, en el bachillerato, licenciatura, maestría y doctorado, el periodo rectoral del Ingeniero Hernández Vélez ha marcado un hito histórico en el desarrollo de la Universidad Autónoma de Coahuila. Los retos son grandes, pero la comunidad universitaria en términos generales se ha mostrado abierta y dispuesta a mantener el voto de confianza para el ingeniero Salvador Hernández Vélez, en particular opinión, una decisión atinada y apegada a los hechos.

Porque en los hechos se da el liderazgo, el líder real inspira,  y motiva para el cambio. La Universidad Autónoma de Coahuila tiene un liderazgo latente, se llama Salvador Hernández Vélez.