Ya es ley como agravante, uso de substancias tóxicas en delito de abuso sexual a menores

 Durante la décima tercera sesión, del segundo período ordinario del Congreso local realizada este miércoles, fue aprobado por unanimidad el dictamen de la Comisión de Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia, relativo a la proposición presentada por el diputado local de la fracción parlamentaria del PRI, Jesús Andrés Loya Cardona, por el que se adiciona la fracción VI al artículo 231 del Código Penal de Coahuila de Zaragoza.

Durante la sesión celebrada por el Pleno del Congreso el día 12 del mes de noviembre del presente año, se acordó turnar a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales la iniciativa cuyo objetivo es que se incluya como agravante en el delito de abuso sexual en persona menor de quince años, el que se hubiera administrado a la víctima alguna sustancia tóxica.

En ese sentido, en la legislación penal se establecen penas a quien haga que un menor o incapaz ingiera bebidas alcohólicas hasta alcanzar un estado de ebriedad que lo haga trastabillar; o ilegalmente haga que consuma narcóticos. Así mismo, se encuentra penalizado el que se venda o suministre a una persona menor de dieciocho años, una sustancia o líquido con efectos narcotizantes y adictivos, sin embargo, el promovente manifiesta que no se considera una agravante cuando se administran este tipo de sustancias a menores con el fin de cometer el delito de abuso sexual.

La Comisión dictaminadora coincidió con el promovente en la necesidad de la reforma, ya que con ello se contribuye a brindar protección a la integridad, la libertad, la salud y la vida de las niñas, niños y adolescentes coahuilenses, redoblando esfuerzos para generar un marco normativo que garantice su autonomía y dignidad, fortaleciendo el respeto a sus derechos humanos.

Por ello, se adiciona la fracción VI al artículo 231 del Código Penal para el Estado de Coahuila de Zaragoza, para quedar como sigue:

Artículo 231 … I. a la V. …

  1. (Se administren sustancias tóxicas)

Se hubiera administrado a la víctima alcohol, fármacos, narcóticos o cualquier otra sustancia natural o química que afecte su comportamiento. (EL HERALDO)