Aires de cambio están venteando por el país, por fin después de escribir en esta columna que a este país le hace falta un contrapeso, y que los únicos que podían hacerlo eran los gobernadores de la Alianza Federalista, por fin se observan sus resultados.
Dichos gobernadores han puesto el ejemplo a sus partidos, en representar una oposición real y no de palabra. Esta película ya la habíamos visto allá por el 27 de marzo de 1839, cuando Antonio Canales Rosillo, José María González y Antonio Zapata se levantaron en armas y declararon la independencia de la República de Río Grande; cuyo territorio comprendía los actuales estados de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila, así como la franja de territorio entre los ríos Bravo y Nueces. Coahuila, sería en el futuro la cuna de grandes héroes de bronce y de movimientos revolucionarios, también protagonista en el tema separatista.
En enero de 1840, en un lugar llamado Rancho Oreveña, en Coahuila, según los grandes historiadores, era la aparente respuesta federalista al gobierno centralista de Anastasio Bustamante, (algo parecido como lo que sucede actualmente el joker de Macuspana) que había provocado el descontento popular por la promulgación de la nueva constitución llamada “Las Siete Leyes”. Es decir, en las llanuras de estos tres grandes estados corre siempre el viento del respeto al federalismo y de no ser así defender este precepto, hasta con las armas cargamos. Esta vez no hubo cañonazos o grandes escaramuzas, los 10 gobernadores respaldados por el pueblo bueno y sabio, que los llevo a ganar sus estados y respaldados por todos los sectores alzaron a voz contra los abusos.
El Gobernador Riquelme hizo suya la frase del “Chato Arizpe” (como le llamaba mi maestra de hermenéutica Sanjuanita Torres Ruiz). Cito al gobernador “Y parafraseando a Miguel Ramos Arizpe, uno de los padres del federalismo y cuyo mensaje está plasmado en los muros del Palacio de Gobierno: “No estamos mendigando favores, la misión que nos confió el pueblo es de honor y de justicia, no de granjerías ni bagatelas”. Hoy más que nunca la unión y la postura de los gobernadores de hacer un bloque opositor para detener la sed de venganza de todos esos resentidos que llegaron al poder, apoyados por otros resentidos, es el resultado de este desgobierno.
Recuerde, el Gobierno Federal eliminó las guarderías, los programas sociales, el apoyo a los niños con cáncer, los fideicomisos y el último golpe lo dio al fondo se salud, que necesita el dinero para sus programas sociales ahora que vienen las elecciones. MORENA tiembla y temen que pase lo que, en Coahuila e Hidalgo, los aires de cambio en la política nacional.
Autor
- Reportero y conductor de noticias de Canal 6 Saltillo y canal 4 en Monclova. Taurino de nacimiento y Tigre de corazón. Amante de las peleas de gallos.
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