ZAGAL

Atípica Elección

Si se tuviera que explicar a la pandemia del COVID-19 con una sola palabra, sería reto.

Y es que, una situación extraordinaria es lo que genera, claro, depende de la perspectiva de cada quien, pero en esencia es lo que debe de representar si se cuenta con una esperanza en el porvenir.

Salud, economía, educación, derecho, entre muchos otros, han presenciado un enfrentamiento directo con el reto que conlleva seguir con sus funciones de naturaleza esencial, aún, en estos tiempos, mediante la adopción de medidas nuevas y limitativas, hasta cierto punto, ya que algunas de ellas la pandemia ha servido como motivo de innovación que ha generado mejoras en procesos o funciones  no previstas.

Ahora, quien se perfila para ser protagonista ante este desafío es la democracia participativa, pues, en tan solo tres días, las y los ciudadanos de Coahuila e Hidalgo seremos los actores principales en el primer ejercicio electoral durante la era COVID-19.

Por orgullo y obligación -hasta cierto punto- me centraré en el caso de Coahuila, pues es donde está la mayor presencia de quien lee estas líneas, no obstante, si alguien, por alguna manera leyera esto en Hidalgo, no creo que difiera en mucho.

Este próximo domingo 18 de octubre las y los ciudadanos de Coahuila votaremos para renovar el Congreso del Estado, mismo que se conforma por 25 diputaciones, de las cuales 16 son electas bajo el principio de mayoría, mientras que las nueve restantes se acotan a las normas del proceso que implica cumplir con el principio de la representación proporcional.

Serán 11 los partidos políticos que veremos en la boleta, y en algunos distritos habrá un candidato independiente.

Quienes podremos ejercer nuestro derecho, somos aquellos que contemos con nuestra credencial para votar vigente, lo que nos da entrada a estar inscritos en la Lista Nominal de Electores que, para el cierre realizado para esta elección, es de 2 millones 227 mil personas.

En cuanto a los instrumentos para llevar a cabo el ejercicio de la elección, se tiene contemplado la instalación de 3,803 casillas, donde se encontrarán repartidas las boletas -una por cada persona inscrita en la lista nominal- y más de 26,700 funcionarios.

Un aspecto a considerar que arroja la estadística de participación es que, en este tipo de elecciones denominadas intermedias, el porcentaje de participación es muy por debajo del porcentaje que se obtiene en una elección concurrente a un proceso electoral federal.

Ahora bien, a pesar de ser esto una tendencia repetida a mitades de la administración estatal, lo que hace atípica a esta elección 2020 es el pronóstico respecto del miedo al riesgo de contagio que se vive en el mundo, lo que podría ocasionar un descenso considerable en la participación del electorado en nuestro estado, ya de por sí baja en las intermedias. Por eso es que la primera parte del enfrentamiento a este reto se encuentra en confiar en las medidas protocolarias que han decidido tomar las autoridades.

También, se la ha calificado a estas elecciones como un indicio respecto de la vigencia de la democracia en estos tiempos de pandemia; además, sin intención de menospreciarla, esta elección será una prueba importante de cara al proceso federal del 2021, pues se prevé que el coronavirus siga presente entre la sociedad.

En fin, con esto dicho lo que se pretende es animarlos a que, bajo estrictas y rigurosas medidas sanitarias, salgamos a votar este próximo domingo, por quien sea, pero votar. Para algunos podrá leerse como una irresponsabilidad de parte de un servidor, pero creo que por encima de todo está el deber cívico de fomentar y hacer realidad la participación en la vida democrática del país, y en este caso de nuestro estado Coahuila, en especial en estos tiempos donde tenemos la oportunidad de romper con lo pronosticado y que lo atípico se encuentre en que las y los coahuilenses consideramos a la democracia como actividad esencial, aunque sea por un solo día.

 

Reciban un saludos, muchas gracias.

Nos leemos la próxima semana.

 

@Dan_Fdz