Comunidad San Aelredo en contra de «cura de homosexualidad» de Cristo Vive

Luego de que en el Congreso de la Ciudad de México se aprobó este viernes la prohibición de terapias, conferencias y demás actos relacionados a «corregir» la orientación e identidad de género de las personas, lo que afecta directamente a la población LGBTTTIQ (Lésbico, Gay, Bisexual, Transexual, Transgénero, Trasvesti, Intersexual y Queer), Noé Leonardo Ruiz Malacara, presidente de la Comunidad San Aelredo Asociación Civil, recordó que la Casa de Rescate Cristo Vive, en Saltillo, ofrece «una cura de la homosexualidad» tomando como eje a la religiosidad, lo que en sus palabras no debería permitirse, siguiendo el ejemplo de la capital del país.


«En Saltillo solamente una organización ofrece curar la homosexualidad, se trata de la Casa de Rescate Cristo Vive. Desde hace muchos años, han dicho que la homosexualidad es curable e incluso muestran algunos supuestos testimonios de personas que se han curado de homosexualidad a través de terapias cuya base es la religión más no una base científica que lo compruebe», dijo en entrevista con El Heraldo, Noé Leonardo Ruiz Malacara.


El activista consideró que no aceptar la identidad de una persona a nivel social, genera actos de odio y discriminación por parte de quienes ven a la diversidad sexual como una enfermedad, lo que ha recaido en asesinatos y agresiones contra personas LGBTTTIQ.


«La población LGBTTTIQ sufre al estar bajo este tipo de terapias. Lo que esperamos es que a partir de esto la prohibición se de en el resto de la República. Nosotros conocimos el caso de tres personas, una chica y dos chicos, que fueron llevados con engaños a Cristo Vive, y cuando tuvieron la oportunidad de salir, lo hicieron. Hablaron con sus papás del hecho de que fueran homosexuales no iba a cambiar nada de su vida», externó.


«No hay un entendimiento con ellos porque dicen que Dios odia la homosexualidad. Cuando una persona está tan metida en esas cuestiones, no hay nada que lo pueda hacer cambiar. Inclusive lo que hablan y manejan son versículos de la Biblia fuera de contexto, que no tienen nada que ver con la homosexualidad», agregó. (OMAR SOTO)