ZAGAL

Caso de Emergencia

Hace ya casi 5 meses, publicamos en este espacio mi amigo Cesar y un servidor nuestra opinión respecto de lo que en ese entonces se encontraba en la boca y pluma de muchos; lo cual se trataba de la aprehensión del ex-director de PEMEX, Emilio Lozoya Austin en Málaga, España y que había sido propiamente adjudicada como medalla por el actual gobierno federal para hacernos ver su “firme” combate a la corrupción.

La actual novedad la encontramos en que, después de este tiempo transcurrido, pareciera ya, por fín, existir el inicio de un posible proceso de extradición. Es cosa de que la faltante instancia judicial en España determine cuándo sería el proceso.

En aquella columna escrita durante las vísperas de la detención, la cuestión que se dejó sobre la mesa y a su criterio, querido lector, era que aún aceptando a lo acontecido como una acción contundente, lamentablemente de manera simultánea la realidad nos encaminaba – y bien que lo hizo – a no poder cantar victoria en ese momento.

Y hacíamos ese comentario basándonos esencialmente en dos cosas: La primera nos referíamos a que el debido proceso en nuestro país parece ser firme, pero si uno se adentra, se percata de que este cuenta con una extrema delicadeza, la cual, si se le expone de manera contundente al juzgador, su deber sería el de actuar en favor de la salvaguarda de las garantías. Y segundo, hicimos alusión a cómo es que hemos sido testigos de cómo esta administración ha optado por exonerar casos similares en temas de corrupción; por lo que concluimos en que todo puede pasar.

Algo que no señalamos, porque esperábamos que esta se llegase a aplicar en el momento para concretar la extradición de uno de los principales acusados por este gobierno desde su campaña, fue la posibilidad de que el gobierno le llegase a dar a los distintos medios existentes para ejercer presión y llevar a cabo el procedimiento, un estado de herramienta, de esas que se utilizan solamente en caso de emergencia.

Y es que, como lo comentamos en febrero, una de las interrogantes que permea en todo proceso que se resuelva por vías jurisdiccionales en nuestro país, sobre todo, cuando el caso a dirimir trae consigo factores de índole público, es sobre si lo que se debe buscar es  hacer justicia o aplicar el derecho.

Para mayor entendimiento, el doctor Rafael Rojina Villegas, uno de los mayores y mejores ejercedores y exponentes de la justicia en México, lo explicaba bajo el argumento de que, si bien, la justicia es un fin del derecho, pero no significa que sea elemento de su definición. Lo asemejaba con la función de un ojo. El ver es la finalidad de dicho órgano, pero la misma no implica un elemento esencial en la definición de ojo, pues un ojo que no ve, sigue siendo un ojo; lo mismo con el derecho, aquel que no realiza la justicia, sigue siendo derecho, pero al igual que el ojo que no ve, pierden su finalidad.

Lo anterior se explica, puesto que lo que en el pasado nos preguntabamos muchos, al dia de hoy, en este caso, sigue quedando en duda, pues seguimos viendo cómo es que durante este periodo de tiempo se han derivado sucesos paralelos a la historia que también parecieran ameritar una consecuencia legal, pero lo que realmente pareciera suceder por parte del gobierno es que no es la misma medición para todos, justificándose, si, con base en el derecho, pero ¿dejando de lado la justicia?

Lo escribo como pregunta para que la contestemos usted y yo.

Para agregar, solo haría falta ser conscientes de los tiempos en los que se está suscitando esta nueva noticia derivada de la coyuntura que tienen rato arrastrando este nuevo gobierno y sus seguidores. Y es que, hoy son inminentes las deficiencias que el actual gobierno está teniendo en múltiples ámbitos – económico, salud pública e inseguridad – a los cuales yo le agregaría ya el tema electoral que, si bien, será hasta 2021 cuando este se presente a nivel federal, lo que la actualidad refleja es que la popularidad que se obtuvo y que se jactan de mantener luego de las elecciones en 2018, como pocas cosas, va a la baja, lo cual parece ser suficiente para declarar que existe un caso de emergencia.

Reciban un saludo, muchas gracias.

Nos leemos la siguiente semana.

 

@Dan_Fdz