IRREGULARIDADES Y ANARQUÍA EN MATAMOROS  

Mayo fue el peor mes en el gobierno –o desgobierno- municipal de Matamoros, que encabeza Horacio Piña Ávila. La falta de carácter, de conocimientos y de entrega al cargo del primer edil no emanado del PRI tienen a este municipio lagunero en una grave y creciente anarquía.

A tal grado que la mayoría de los integrantes del Cabildo dirigieron un oficio al presidente de la Junta de Gobierno del Congreso del Estado, Emilio de Hoyos Montemayor, en la que demandan una auditoría a la administración municipal y que se aplique la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos Estatales y Municipales del Estado.

Solicitan que se integre  una comisión para que investigue actos y omisiones en que supuestamente han incurrido servidores públicos de la administración en perjuicio de los intereses y  las finanzas públicas y el hecho de que el alcalde ha pasado por alto acuerdos del Ayuntamiento.

El mes pasado diez y regidores y las dos síndicas, incluyendo integrantes de Morena y del PES, hicieron mayoría y rechazaron por segunda vez consecutiva las cuentas públicas que presentó el tesorero Gerardo Marentes.

Otro acto de gran gravedad ocurrido también en mayo lo representa el hecho de que el director de Alcoholes, Jesús López Aranda, oficialmente dijo en una sesión de la Comisión correspondiente que por instrucciones del alcalde Horacio Piña, los recursos obtenidos por la expedición de permisos para la venta de bebidas alcohólicas se entregan a Roberto Piña, primo del presidente municipal. Jesús López ya habría sido dado de baja.

A Beto Piña se le señala como el “poder tras el trono”, el que toma decisiones en las diversas dependencias, sobre el alcalde, que se ha ganado el mote de “doctor Caguamas”. En mayo también se ventiló el nepotismo del edil, quien habría colocado a 29 familiares, entre tíos, sobrinos, primos, cuñados en las diversas dependencias, lo que da una erogación de 3 millones 600 mil pesos anuales. Al hijo del alcalde, del mismo nombre, también se le señala de “cobrar piso” a los comisariados ejidales por la venta de cerveza.

En el oficio entregado en el Congreso del Estado, que firman la mayoría de los integrantes del Cabildo, también se acusa al edil matamorense de realizar contratos de adjudicación directa injustificadamente, de manipular cifras derivadas de acuerdos de la Comisión de Hacienda y de la imposición de contribuciones y aprovechamientos fuera de la Ley de Ingresos 2020.

Con tantas irregularidades, con haber cedido su gobierno a su primo Beto y sobre todo, sin control de su Cabildo, no se ve cómo le hará Horacio Piña para continuar y terminar su gobierno.