SEÑALES DE NUESTRA HISTORIA

Nuestra ciudad, Saltillo, se encuentra llena de lugares históricos, muchos de los cuales han sido señalizados por nuestras autoridades, para conmemorar los sucesos que ahí ocurrieron. En esta ocasión, te platicamos sobre el Museo Rubén Herrera, que invita a conocer la vida y obra del personaje a quien debe su nombre, del cual también hablaremos.

Instalado en un inmueble que data del siglo 18, el Museo Rubén Herrera fue inaugurado en 1971 y debe su nombre al artista pictórico zacatecano formado en tierras coahuilenses, Rubén Herrera, quien creó la Academia de Pintura de Coahuila en el Ateneo Fuente, de la cual emergieron diversas generaciones de artistas.

El pintor protagonista de este recinto cultural −que cuenta con cinco salas y que fuera reinaugurado en 2016, tras siete meses de remodelación− estudió de 1909 a 1920 en Italia, donde aprendió técnicas pictóricas europeas que harían madurar el despliegue de su pincel en el lienzo o del carbón y el lápiz en el papel, para luego regresar a la ciudad capital de Coahuila, a la que había llegado con sus padres, Perfecto Herrera Salazar y Salomé Flores, después de su nacimiento en 1888.

Fue su manejo de la técnica −que utilizó principalmente para crear retratos personas en labores cotidianas y escenas militares, algunos de los cuales aún se exhiben en el Museo que se ubica en el cruce de las calles General Cepeda y Juárez, dentro del corazón de Saltillo− lo que lo convirtió en maestro de las hermanas Figueroa, quienes habitaron el domicilio del espacio museístico que fuera llamado «Casa de las Figueroa», antes de su venta a finales del siglo 19, para ser remodelado a mediados del 20 con elementos de tipo neocolonial.

La distinción de que el Museo lleve el nombre del autor de obras como «Autorretrato Sonriendo», «Retrato de la Sra. Ida Palomba», «Mujer» y el «Retrato de la Srita. Dora Scaccioni», se debe al aporte que el artista −fallecido en 1933 en la Ciudad de México− diera al desarrollo del arte en el noreste.

Cabe señalar que el Museo Rubén Herrera −que cuenta además con sala de exposiciones temporales, auditorio y biblioteca, y que está abierto al público de martes a domingo, de 10:00 de la mañana a 7:00 de la tarde− se hizo realidad gracias a la apertura de Mario Herrera, hijo del zacatecano, para hacer público su legado artístico. (OMAR SOTO)