Requieren universidades nuevo esquema de financiamiento

En este año, la Universidad Autónoma de Coahuila tendrá un pasivo de más de 639 millones de pesos por pago de pensiones, renegociación de contrato colectivo y por contribuciones pendientes, lo que obliga a generar ahorros y gestionar más recursos ante instancias correspondientes.

Así lo señaló en su Segundo Informe de Actividades, el rector de la UAdeC, Salvador Hernández Vélez, ante la comunidad académica reunida en el Teatro de la Ciudad “Raúl Flores Canelo”, de la ciudad de Monclova, Coahuila, durante la Sesión Ordinaria del Honorable Consejo Universitario, y donde se tuvo como testigo de honor al gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís.

El rector señaló la necesidad de modificar y unificar el esquema de financiamiento de las universidades públicas para garantizar la meta del Gobierno federal en el sentido de crecer la cobertura de estudiantes en el país en 4 por ciento anual dentro de la educación superior que ahora está en una cobertura general del 38 por ciento, la más baja de América Latina, y cuya meta es llegar al 50 por ciento al final de sexenio.

“Se requiere un nuevo esquema de financiamiento para la educación superior y medio superior, para potenciar el crecimiento y saneamiento de los recursos productivos de las universidades”, apuntó.

Agregó que actualmente existen situaciones tan dispares como la de las entidades de Yucatán y Oaxaca, que reciben 87 por ciento de recurso federal y el resto es estatal, en tanto que Coahuila recibe un porcentaje menor, de apenas 50 por ciento federal, por lo que la carga a las finanzas del estado es mayor a la de otras entidades federativas, por lo que se podría pensar en un porcentaje igual para todas las universidades del país.

Recordó que 11 universidades en México se encuentran financieramente comprometidas, y en varias los pasivos de pensiones sobrepasan los recursos que recibirán en 2020 “y no son pocas las que deben aguinaldo y sueldos del año pasado”.

Reconoció el trabajo realizado y acompañamiento del Gobierno de Coahuila, para recibir apoyo del Gobierno federal y hacer frente al pasivo de pensiones, ya que el convenio tripartita no contempla ningún recurso para estos pagos, además de que en ocho años no ha crecido el presupuesto ordinario en términos reales pero sí las necesidades de la universidad ya que la matricula se incrementó 10 por ciento; en cambio, en los últimos tres años se han tenido recorte en los fondos extraordinarios que no precisó.

Dentro del Plan General de Inclusión, la Universidad aumentó 5.3 por ciento la matricula a nivel licenciatura, y reserva el 10 por ciento de los cupos de admisión a estudiantes de escasos recursos con alto desempeño académico, lo que significó en este año 731 nuevos estudiantes beneficiarios, y un porcentaje mayor de aspirantes aceptados en 2019 respecto del 2018.

En general, se creció 5.2 por ciento más en bachillerato y 6.7 por ciento en licenciatura, en tanto que la eficiencia terminal aumentó 9.07 en nivel licenciatura. (ESMERALDA SÁNCHEZ | INFONOR)