A LA BÁSCULA  

A Coahuila ya le toca

 Este viernes estará nuevamente en Coahuila el presidente Andrés Manuel López Obrador, un estado en el que recio y quedito, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís ha tenido, siempre, la mano extendida al primer mandatario, siempre dispuesto a colaborar en lo que haya que hacerlo, pero también que ha sido muy firme en sus posicionamientos cuando en algo no está de acuerdo.

Coahuila fue una de las primeras entidades en el país, en solidarizarse y apoyar desde el primer momento, la creación de la Guardia Nacional, y -quizá puede que haya variaciones, ligeras, al momento de revisar minuciosamente los datos duros- es también uno de los estados en el que mayor número de instalaciones militares se han construido, lo que habla de la excelente relación en materia de seguridad entre Federación y Estado.

Producto de esa coordinación es que –aunque no ha sido nada sencillo- Coahuila ha resistido, pero sobre todo respondido de la mejor forma, los embates de los carteles que intentan reposicionarse y tomar el control en nuestro estado. Quizá el botón de muestra más emblemático sea el ataque a Villa Unión el sábado 30 de noviembre donde si bien el número de muertes superó la veintena, las bajas civiles fueron las menos, por una reacción inmediata y muy bien coordinada entre las corporaciones estatales, la policía federal, la guardia nacional y el ejército mexicano.

Aquellos hechos le valieron al gobernador coahuilense el reconocimiento tanto de la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, como del propio presidente López Obrador, quien reconoció en Riquelme Solís, a uno de los gobernadores que más se aplica en materia de seguridad.

Fue esa mañana del lunes 2 de diciembre cuando el presidente elogió la respuesta del estado coahuilense ante el ataque a Villa Unión, que prometió y a los pocos días cumplió, presentar la lista de los gobernadores que preferían quedar dormir más tarde antes que asistir a las reuniones de seguridad. Y el reconocimiento a la estrategia de Miguel Ángel Riquelme se dio, a pesar de que es contraria a la política presidencial de ‘abrazos no balazos’. Acá a los delincuentes no se les ha tratado con la menor delicadeza, sino que se les respondió con la misma moneda que intentaban dejar en nuestro estado.

Hubo un momento también en el cual, cuando se volvió una práctica cotidiana que los seguidores del presidente abuchearan y hasta agredieran verbalmente a los gobernadores anfitriones durante las giras presidenciales, el que puso un alto fue el gobernador coahuilense, quien en su momento sostuvo que si ese iba a ser el tenor, no lo volvería a acompañar en sus giras por Coahuila, sobre todo si no traía obras de beneficio para los coahuilenses; que acudiría a recibirlo al aeropuerto pero no más, si las visitas eran solamente para promocionar sus programas sociales.

De acuerdo con el área de comunicación social de la delegación del gobierno federal en la entidad, el Presidente celebrará en Saltillo el primer aniversario del programa ‘Jóvenes construyendo el futuro’, con un encuentro de beneficiarios del mismo, en el Parque Las Maravillas.

Si Andrés Manuel López Obrador no lo trae en su agenda, empujado por senadores y diputados federales coahuilenses sin distingo de partidos –aunque de pronto da la impresión de que Coahuila no tiene ni senadores y legisladores federales-, apoyados por los de Nuevo León, debieran poner sobre la mesa el asunto de las carreteras libre y de cuota de Saltillo a Monterrey y viceversa, que –junto con el tramo carretero conocido como ‘Los Chorros’-, se ha convertido en una verdadera trampa mortal.

En diciembre se tuvo una multicarambola con saldos fatales, y en esta misma semana, aunque sin pérdida de vidas humanas qué lamentar, la historia se volvió a repetir, si bien con daños menores. Cada que llueve o baja la temperatura, la niebla en la Monterrey-Saltillo es una constante y uno de los principales factores que han incidido en los constantes accidentes, pero como una especie de burla a los usuarios, al entrar este 2020 la empresa concesionaria de la autopista, aplicó un incremento en las tarifas de peaje.

Ojalá que esta nueva visita del Presidente a Coahuila, no sea nada más para venir a prenderle la velita de un año a uno de sus programas estrellas. Ojalá que ya traiga algo que verdaderamente beneficie e impacte al Estado.

Mucho reconocimiento, mucho reconocimiento presidencial al gobernador coahuilense, pero hasta ahorita solamente ha sido jarabe de pico, no está traducido nada en obras o acciones.

Como que a Coahuila ya le toca ¿No lo creen?

 

laotraplana@gmail.com

 

@JuianParraIba