SE PRENDEN ALERTAS EN TORREÓN

Los delitos de los últimos días en la región prendieron las alarmas en las corporaciones policiacas, el sector empresarial y la sociedad en general en Torreón.

Robo de autos, asaltos, cuerpos humanos encontrados a la orilla de caminos y carreteras ha sido la constante en los días y semanas recientes, sin que las autoridades atinen a frenar esta preocupante y delicada ola delictiva.

Hay que aclarar que en lo general el índice de delitos en la región y en toda la entidad está por debajo de la media nacional. De hecho, Coahuila ocupa el cuarto lugar en la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (INEGI), sólo debajo de Yucatán, Baja California y Aguascalientes. De acuerdo con dicha encuesta, en el Estado un 63 por ciento de la población se siente segura. El lugar donde la gente se siente más desprotegida o insegura siguen siendo los cajeros automáticos.

Según los últimos datos del INEGI, en la Región Lagunera son bajos los índices de delitos, con todo y que el 24 por ciento de los hogares ha tenido por lo menos una víctima, porcentaje abajo de la media nacional.

La iniciativa privada tiene razón cuando advierte que de no haber una reacción inmediata y eficaz de parte de las autoridades los delitos y crímenes podrían incrementarse y agravarse. Y peor irán las cosas si el gobierno federal no atiende la situación, considerando un incremento en la asignación de recursos.

Hace un año el fiscal general de Justicia del Estado, Gerardo Márquez Guevara, anunciaba el inicio de operaciones de la Unidad de Reacción e Investigación Criminal, que se creó precisamente para enfrentar el robo de vehículos. Por lo  visto, los resultados no son halagadores.

Es momento de replantearse las estrategias de coordinación entre las corporaciones locales, estatales y federales, en las reuniones que semanalmente se llevan a cabo, a las que asisten también autoridades civiles, y de actuar en consecuencia; no bajar la guardia como dicen los funcionarios, antes de que se recrudezcan los asaltos, robos de autos y robos en general, levantones y apariciones de cuerpos desmembrados.