CAFÉ POLÍTICO

 “EL QUE MUCHO ABARCA, POCO APRIETA”

Con el próximo arribo oficial a la presidencia del Comité Municipal del Partido Acción Nacional de Torreón por parte del primer regidor, José Ignacio García Castillo, es necesario que asuma su responsabilidad como funcionario serio y responsable, aunque mucho lo dudamos. Dice el dicho popular: “El que mucho abarca, poco aprieta”. Es decir, este polémico edil deberá dejar uno de los dos cargos: la primera regiduría, o recular hacerse cargo de las riendas del PAN. Cabe destacar que Torreón se ha visto inmerso en una fuerte problemática social, cuyo gobierno se ha allanado en la vorágine de la corrupción en varias de sus áreas; en la falta de toma de decisiones; y en la falta de dirección ya que no existe proyecto político, proyecto de una buena gobernanza. A pesar de que el alcalde Jorge Zermeño lleva 18 meses en el cargo (un año y medio), no ha sabido despegar; o no quiere arrancar. Entre los pocos o malos resultados de esta administración municipal, es la nula inversión y la falta de empleos, solo por citar un botón de muestra.

 

LOS MÁS ODIADOS Y ABORRECIDOS

Ahora bien, los diversos sectores de la sociedad civil se han pronunciado                           –todos– en contra del titular de la Dirección de Tránsito y Vialidad Pedro Luis Bernal Espinoza, y de sus agentes, por la voracidad extrema con que se conducen, con la que trabajan. Los agentes laboran bajo consigna de levantar el mayor número de infracciones. Vamos, la función principal de toda corporación de vialidad es regular el tránsito vehicular para ordenar la movilidad urbana a fin de que haya un flujo continuo de vehículos evitando el mayor número de accidentes. Pero no. Los agentes viales han desvirtuado su función y se han dedicado a cazar, azotar, perseguir, hostigar, castigar y golpear a automovilistas ya sean hombres o mujeres. ¿Con que fin? Con el fin de sacarles dinero de donde sea, dejando a miles de conductores sin el pan de cada día. Y ello es terrible y lamentable. Por eso la Dirección de Tránsito y Vialidad es la más odiada y aborrecida de toda la administración. Que recuerde Jorge (Zermeño) que la ciudadanía está sumamente harta y cansada de estos bribones mordelones. Vamos, el estilo de gobierno municipal de “dejar hacer, dejar pasar”, está en todo su apogeo.

 

QUE DEJE UN HUESO

Volviendo con Nacho García. Insisto, este placateniente no podrá con dos responsabilidades relevantes como el dirigir un partido antes, durante y después de un proceso electoral; y ser primer regidor del Ayuntamiento. Ambos trabajos requieren del 100 por ciento del tiempo de quienes los desempeñan, por lo que si García Castillo no deja la regiduría, ninguno de los  trabajo le saldrá bien. Máxime y en virtud si va como candidato a una diputación local. De ahí que si quiere ganar la justa comicial, deberá ser inteligente y dejarle la silla a su suplente.

 

¿QUÉ ONDA PEDRITO?

Por cierto, el también apasionado pero desinflado Pedro Ávila Aguilera                        (es buen hombre, pero se rajó) podría ir por una posición al Parlamento coahuilteca. ¿Por qué no? Aunque los zermeñistas se lo escabecharían sin darle oportunidad de llegar ya que el pastel lo quieren solo para ellos. Otros dicen que Pedrito irá a la Gerencia Administrativa de Simas-Torreón. Que con cualquiera de los dos huesos lo convencieron y le bajaron la guardia a él y a miles de panistas, bien nacidos, que tendrán que esperar a que llegue un verdadero paladín justo y valiente con el fin de revitalizar ese maltrecho y corrompido partido.

 

GRILLA EN EL PAN

En cuanto a la alcaldía de Torreón. Continúan sumándose más calefactos por la principal silla del edificio de la Plaza Mayor. Por ejemplo, la mejor carta del PAN es sin duda Marcelo Torres Cofiño, quien ha hecho un plausible papel al frente del Poder Legislativo local. Marcelo ha sabido ser oposición ecuánime, justa y equilibrada dándose con ello la gobernabilidad que tanto necesita nuestra entidad. Claro que ello le ha generado celos de sus propios correligionarios al seno el Congreso como Juan Antonio García Villa, Fernando Izaguirre y María Eugenia Cázares, que han de pretender ver a Coahuila sumido en crisis y en la ingobernabilidad, lo que a nadie conviene. Huelga decir que estos tres personajes del PAN, también se han subido a la silla voladora porque quieren ser candidatos a la alcaldía.

 

FIERROS A LA LUMBRE

Pero el alcalde ha puestos todos los fierros en la lumbre a favor de su cónyuge Astrid Casale Fraustro, lo que sería una lucha desigual al interior del blanquiazul. Además de todos ellos, también la quiere Memo Anaya, que maneja a su antojo a Chuy de León, confirmado dirigente estatal del PAN. Carajo, hasta De León Tello. Es decir, la lista es muy larga ya que incluso el placateniente Pepe Nacho –si gana la diputación local–, habría de calentarse para suceder a su amo JZI. Lo que no saben todos estos personajes (salvo Marcelo Torres) es que Zermeño ganó no por la estructura panista ni por el voto de los militantes; sino por el sufragio de la sociedad civil. Si van en la boleta cualquiera de los nombres de Astrid, Guillermo, Juan Antonio, María Eugenia, Jesús, Fernando o hasta el de José Ignacio, nunca sería lo mismo ya que la gente los tienen etiquetados con grupos tradicionales del PAN de toda la vida. Sobre todo los que no han querido soltar las riendas del poder.

 

JAVIER GUERRERO

Por el lado de Morena quienes tienen posibilidades reales de acceder a la candidatura rumbo a la alcaldía de Torreón, o incluso para la gubernatura son: Javier Guerrero (solo gubernatura), Santana Armando Guadiana Tijerina (solo gubernatura), Javier Borrego Adame, Reyes Flores Hurtado, Luis Fernando Salazar y hasta José Ángel Pérez (aunque es del PT) el diputado federal más faltista de Coahuila y de los 500 pares al Congreso de la Unión. Es decir, la caballada está rechoncha. Por ejemplo; Javier Guerrero –secretario general del Seguro Social– es el coahuilense mejor posicionado en la Ciudad de México y al seno de la Cuarta Transformación. Lo conoce bien el presidente AMLO y se hablan de tu. Hay química y buena comunicación entre ellos. El sanpetrino, en el supuesto de que enderece la nave (IMSS), sería la carta más fuerte de Morena.

 

EN LA CONGELADORA

En cuanto a Armando Guadiana, como que se bajó del caballo. Al bigotón ya no se le ha visto un día sí y otro también en bautizos, primeras comuniones, confirmaciones, cumpleaños, quince años, bodas y demás eventos familiares y públicos tomándose selfies. Padrino de egresados y de todo lo que se le ponga encima, como que Armando inició desbocado la carrera por suceder al intenso MARS. Cabe señalar que en política no es lo mismo paso que dure que trote que canse. El salir primero que todos, no es garantía de ganar o agandallar una candidatura. Además, últimamente el bigotón le ha llevado la contra a AMLO, por lo que se asegura que las relaciones con el Jefe de jefes, están en la congeladora.

 

JAVIER PODRÍA SER

Por el lado de Javier Borrego que dicho sea de paso, iba a ser sacerdote pero colgó los hábitos del seminario. Se quedó a la mitad del camino, pero se fue a la carretera con su primer camión. Muy amigo y compadre del padre Gerardo Zatarain. Ok. Javier, líder de transportistas y de la CATAM en la Región Laguna de Coahuila y Durango (algo así como la CTM pero de Morena), ha venido sobresaliendo con la penetrante chamba que trae; pero debe administrarse. La semana pasada en el Hotel Posada del Río de Gómez Palacio transportistas y el Grupo Especializado al Transporte –GAET– de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), llevaron a cabo jornadas de trabajo para delinear programas y acciones para dar solución a la problemática del transporte en el norte del país. Nuevamente Javier llevó la voz cantante. Su evidente cercanía con Mario Delgado, coordinador de la fracción parlamentaria de los diputados de Morena en San Lázaro, le da un fuerte plus a Borrego. Vamos; tiene reales posibilidades de candidatear por Torreón.

SALAZAR TENDRÁ QUE METERSE DE LLENO

Otro que tiene posibilidades por la alcaldía es Luis Fernando Salazar Fernández, neomoreno que abandonó las filas del PAN hace apenas unos meses. Con mínima militancia en Morena, Luis Fernando ha venido picando piedra para acercarse a AMLO a través de Julio Sherer Jr, Coordinador de Asesores Jurídicos y heredero de la Revista Proceso. Cabe destacar que AMLO y Proceso se han enfrascado en un desaguisado mediático porque la revista no le ha echado porras (como si fuera su chamba), por lo que López Obrador señaló públicamente que es de los medios que “no se portan bien”. Por cierto, a pesar de que AMLO ha comprado decenas de página a la revista a manera de publicidad gubernamental (una millonada de pesos), Proceso ha mantenido su línea editorial. Luis tiene posibilidades, aunque no se ve de que grupo esté agarrado ya que se ve muy solo y muy suelto por lo que tendrá que apretar el paso. De los restantes calefactos, hablaremos en próxima entrega.

 

Autor

Ramón Betancourt
Columnista