Requiere análisis flujo migratorio

Monclova. El efecto migratorio que se ha incrementado en el país y la deportación que amenaza la Unión Americana de connacionales ilegales hacia México, obliga a que el Gobierno federal analice la problemática que podría traer en los estados limítrofes con Estados Unidos.

Marco Antonio Ramón, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en la región Centro, destacó la necesidad de ir buscando la forma de amortiguar los efectos que ello pudiera traer.

«Esto ya se ha convertido en un problema nacional, la Presidencia de la República debe de poner cartas en el asunto, el presidente López Obrador indicaba que hay fuentes de empleo pero hay que ver dónde están y darle prioridad a los connacionales que sean deportados, antes que los que pasan por el país con miras a llegar al sueño americano», señaló.

Expuso que humanitariamente se les brinda el apoyo a las personas de origen salvadoreño o guatemalteco que atraviesan el territorio para llegar a la frontera y en cualquier oportunidad cruzar al lado americano.

«Desgraciadamente el éxodo migratorio ha sido desproporcionado que ya no pueden con tanta gente», indicó.

Lo ideal sería que, en sus países de origen, se ofrezcan alternativas de solución para evitar que la gente salga y quiera llegar al vecino país del norte.

Precisó que le ha tocado ver familias jóvenes con sus hijos en brazos que dirigen su camino hacia la frontera norte del estado, y es un gran riesgo el que llevan desde que salieron de su país de origen.

«La situación migratoria de Estados Unidos es cada vez más fuerte, esto hace más difícil que los acepten en la Unión Americana, es tarea de los tres órdenes de gobierno y en Coahuila se ha hecho ya parte de este trabajo con responsabilidad por el mandatario estatal», explicó.

Reconoce que quienes ya están en el país, se les debe de apoyar, pero sin descuidar a los mexicanos que también demandan empleo, buenos salarios y mejores oportunidades.

«Habría que darle prioridad a los mexicanos que son los que pagan los impuestos que generan las obras del país, y posteriormente pues que se integren las personas de otras nacionalidades, va a ser un problema social muy complicado», reiteró.

Señaló que en la frontera de Acuña y Piedras Negras como es el caso de Coahuila, se tomaron las medidas por las autoridades estatales y municipales, con buenos resultados, pero, este problema migratorio doble hay que analizarlo detenidamente por la Federación. (INFONOR)