A LA BÁSCULA

Electores veleidosos 

En un periodo muy corto, de apenas tres años, los electores en el estado de Durango han mostrado una veleidosidad, que hace poco predecible el resultado de las elecciones que se realizarán este domingo para renovar las alcaldías de los 39 municipios.

Después de más de 80 años de sucesivos gobiernos priistas, hace tres años, lo duranguenses decidieron otorgarle su confianza al abanderado del PAN y llevaron a la gubernatura a José Rosas Aispuro, quien se convirtió en el primer mandatario de la entidad no emanado –bueno, al menos no propuesto-, por el Revolucionario Institucional.

Dos años más tarde, es decir en la elección del año pasado, los electores del estado decidieron –como en la mayor parte del país- otorgarles a ciegas el voto a los candidatos de Morena, aunque no supieran quiénes eran, y en muchos casos siguen sin saber quiénes son sus representantes en el Senado y en la Cámara de Diputados federal, e incluso en la local.

Además, el proceso interno de algunos partidos que les llevó a la judicialización del mismo e incluso a dar ‘brincos’ con sus candidatos, es decir que dentro del periodo establecido por el calendario electoral para las actividades proselitistas realizaron campaña con más de un candidato, lo que ha provocado desconcierto y confusión entre los ciudadanos.

Las campañas con todo de los cambios de jinetes a mitad del río en algunos casos, no lograron conectar con la gente. Muchos ciudadanos incluso desconocen que habrá elecciones este 2 de junio, y menos saben qué es lo que se va a elegir; y los que lo saben, mantienen dudas respecto de quiénes son los candidatos.

Si a lo anterior se le suma el hecho de que por primera vez en la historia de la entidad la elección de este domingo es totalmente ‘huérfana’ –es decir, sin el acompañamiento de la gubernatura o las diputaciones-, hace pronosticar a analistas y conocedores del mundillo de la política que, si habitualmente en Durango el principal rival a vencer es el abstencionismo, en esta ocasión éste se presenta en grado superlativo.

Y en ese sentido, mucho tienen que ver el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana del Estado de Durango, y aún el propio Tribunal Estatal Electoral, que también aportaron su granito de arena en la generación de confusión para la definición de algunas candidaturas, y en algunos casos hasta atizaron información que generó más dudas que clarificación sobre el asunto.

El Instituto quedó a deber mucho en cuanto a la promoción del voto, no hubo una campaña para sensibilizar a los duranguenses sobre la importancia de acudir a las urnas, de ejercer su voto para cumplir con un derecho, pero que al mismo tiempo es una obligación de todos los ciudadanos.

La autoridad electoral no difundió lo suficiente la elección, y eso, podría terminar por convertir en la que está en puerta, en una de las elecciones con la más baja participación en la historia de la entidad, con mayor énfasis en algunos municipios como Lerdo y Gómez Palacio.

Toda esa mezcla de factores, hacen totalmente impredecible el resultado de las elecciones que, por lo demás, tiene centrado el foco de la mayoría, en los tres principales municipios de la entidad: Durango capital, Lerdo y Gómez Palacio. De los tres, el único que hasta el momento no ha probado la alternancia es éste último.

Pero quizá lo que más incide en ello, es la veleidosidad mostrada por los duranguenses en un periodo muy corto, de 2016 a la fecha.

Contra los pronósticos, ojalá que los ciudadanos de los 39 municipios logren dejar de lado la apatía, el desinterés, el ‘valemadrismo’, y acudan a las urnas. A votar por el partido o el candidato que les parezca la mejor opción, pero que acudan a votar. La mayor parte de los municipios de la entidad vienen arrastrando un atraso histórico en muchos sentidos –educativos, de salud, de seguridad, de infraestructura, de inversión, de empleo-, y no se merecen de su gente el desprecio, la indolencia, el abandono.

Durango y todos sus municipios hoy requieren de todos sus ciudadanos para que en conciencia, en responsabilidad, en compromiso con su ‘patria chica’ elijan a quien consideren que les puede ayudar a ‘levantar la cabeza’.

Veleidosos y todo, ojalá que los duranguenses salgan este domingo con decisión, para ir a las urnas, para ejercer su voto. Que así sea, por el bien de Durango.

 

laotraplana@gmail.com

 

@JulianParraIba