Europa League, Chelsea y Arsenal se juegan mucho en Bakú  

El gran derbi de Londres se traslada a Bakú

Bakú no es exactamente el lugar más inglés de todos, pero la capital de Azerbaiyán será el gran escenario de la final de Europa League entre Chelsea y Arsenal el próximo 29 de mayo y, de paso, tendrá una importante presencia de hinchas británicos que cruzarán toda Europa para poder disfrutar de este evento tan importante.

Uno de los muchos derbis de Londres, que se suele repetir varias veces durante el campeonato inglés, tendrá otra versión más impactante en cuanto asignará un trofeo internacional, algo que sin duda es el gran objetivo de los dos clubes. Tanto el Chelsea como el Arsenal, de hecho, han protagonizado una temporada llena de altibajos y la posibilidad de poder hacerse con este trofeo internacional llena de expectativas a sus hinchas y a sus jugadores.

En especial manera el equipo entrenado por Unai Emery necesita levantar esta copa, en primer lugar porque tras llegar quinto en la Premier League no ha podido sellar el pase a la Champions League. Conquistar la que antes se llamaba Copa de la UEFA sería el pase definitivo a la próxima edición de la Champions, una competición en la que los Gunners no han participado este año por primera vez y que sueñan con volver a jugar. Por otro lado, el conjunto de Maurizio Sarri está en busca de un trofeo que pueda dar una alegría a una hinchada que volverá a jugar la Champions, gracias al tercer puesto conseguido en campeonato, pero que ha sufrido un bajón de tensión y de espectáculo en la segunda fase de la temporada.

Las apuestas de fútbol para la final de la Europa League pronostican un partido parejo, aunque el Chelsea haya llegado a la final de manera más sufrida y tras una agónica tanda de penaltis contra el Eintracht de Frankfurt. Los Blues harán hincapié en el gran momento de Eden Hazard, extremo belga de gran creatividad que ha sellado el pase a la final con el penalti decisivo, mientras que los Gunners podrán contar con la gran asociación entre los dos delanteros Pierre Emerick Aubameyang y Alexandre Lacazette, que con sus embestidas en velocidad han logrado arrastrar a los suyos hasta el último acto de esta copa.

Lo que está claro es que en juego está más que un título, ya que estamos hablando de un clásico londinense que se vuelve a proponer en Europa y conlleva, entonces, una rivalidad y una competitividad importante que tendrán como caja de resonancia el conseguimiento de un título continental. Si para el Chelsea la principal arma será el fútbol de toque de Sarri, un virgen en las finales europeas, el Arsenal podrá contar con la sabiduría de Emery en este tipo de momentos. El técnico vasco, de hecho, ha ganado ya tres Europa League, además de forma seguida, cuando entrenaba al Sevilla. Para todo lo demás estarán la improvisación, el vértigo y las emociones que hacen del fútbol no solo un choque táctico sino un espectáculo lleno de emociones y de momentos.