CAFÉ POLÍTICO 

REFORMA EDUCATIVA

No hay mejor inversión de un gobierno que aplicar recursos suficientes a la educación. Además hay que encuadrar en el marco educativo, programas y acciones tendientes a crear espacios para defender valores y principios de la educación pública, laica y de excelencia, que debe ser la palanca de desarrollo que tanto necesita nuestro país ya que se percibe un retroceso en la economía y en materia de seguridad. Desafortunadamente ayer la Cámara de Diputados aprobó la Reforma Educativa. Al desaparecer la evaluación docente, y aprobar que el sindicato de maestros controle y maneje las plazas de maestros, se dio un paso muy pero muy atrás. Así cualquier burro podrá dar clases en cualquier escuela. Al dejar las plazas de maestros en manos del sindicato, se incrementará la corrupción, por lo que la reforma será un fracaso. En la “mañanera” de ayer el presidente López Obrador señaló: “Se avanzó en este terreno, es un problema menos (…) casi todos votaron por cancelarla, menos los de un partido conservador (…) no habrá venta ni tráfico de plazas, no habrá charrismo sindical, ni sindicatos protegidos por el gobierno, es un cambio por completo”.

 

LA CNTE, ALACRANES EN SU ESPALDA

Cabe destacar que el primer mandatario se muestra iluso y vano; cada día convence menos. Su fea retórica desde Palacio Nacional, le hace perder televidentes, máxime y en virtud si se muestra medroso y apocado ante los embates del presidente Donald Trump. Huelga decir que existe una amenaza de regresión, pues el artículo 16 transitorio de la reforma educativa, contempla a los maestros como trabajadores del Estado (apartado B del Artículo 123 constitucional), y además no se plantea la mecánica operativa para la asignación de nuevas plazas, por lo que a pesar de que AMLO diga que no habrá corrupción (venta y tráfico de plazas), esta arreciará con lindo fervor a pesar de sus designios. Por cierto, el Preciso también se ha visto sumiso ante la dirigencia de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), quien a pesar de haberle hecho bastantes favores y caravanas, sigue con esos alacranes en su espalda.

 

VERDADES Y RUMORES

El pasado miércoles 24 la columna Verdades y Rumores de El Siglo de Torreón, publicó que un hijo del alcalde de Torreón Jorge Zermeño, tiene en puerta hacer grandes negocios con el presunto apoyo de su progenitor. Por razón de salud pública paso a reproducir íntegramente el texto: “No cabe duda de que cuando se trata de comprometer los servicios públicos, en cualquier municipio se cuecen habas. Nuestros subagentes, disfrazados de machotes de contrato, nos informan que en el edificio más caro de la Plaza Mayor “la mesa está servida” para que la bancada del blanquiazul dé luz verde al contrato por el servicio de limpieza de lotes baldíos en la ciudad, por la módica cantidad de 42 millones de pesillos anuales, mismos que saldrán de su bolsillo, estimado lector; sin embargo, esto pudiera resultar peccata minuta, pues nuestros subagentes infiltrados comentan que lo interesante en este asuntillo son los personajes que se encuentran detrás de la empresa “Círculo Recolector”, que ya está lista para operar, pues desde un principio fue elegida por los “interesados” en la realización de este tan anunciado proyecto, el cual, a pesar de ser rechazado en tres ocasiones por la Comisión de Servicios Públicos, fue presentado y presentado con harta insistencia hasta que finalmente será aprobado, para otorgarle las facultades a dicha empresa, dejando de manifiesto una vez más que los tan cacareados concursos de licitación no son más que de membrete, puesto que siempre impera el dedazo con quien se da el mejor “arreglo”. Y en este caso no es para menos, pues los subagentes señalan que quien está detrás de la empresa recolectora de escombros, a través de su brazo financiero Armando Valdés y otro personaje de nombre Guillermo del vecino estado de Durango, es nada más y nada menos que Lalo Zermeño, hijo del alcalde Jorge Zermeño, por lo que queda la gran duda de si será tanta la presión que ejerza Lalo sobre don Jorge como para cumplirle el capricho a su vástago, dejando a un lado los intereses de los torreonenses”.

 

UN TIRO DE 42 MILLONES

Vamos a ver. De darse la especie de que Eduardo Zermeño González se aviente el tiro de limpiar lotes baldíos de la ciudad, según el “Agente 007” se llevaría la friolera de 42 millones de pesos en un año. O sea, 3 millones 500 mil pesos al mes. Es decir, 115 mil pesos diarios, incluyendo sábados, domingos y días festivos. ¿Cómo la ve? Negociazo redondo. Este presunto tráfico de influencias y conflicto de intereses está prohibido por la ley. Vamos: tráfico de influencias y conflicto de intereses es igual a corrupción. Pero seguramente que el nombre de Lalo Zermeño no ha de aparecer en el acta constitutiva de la empresa Circulo Recolector. El Siglo de Torreón los señala de pícaros y ladinos, más no de tontejos. Por eso los negocios que andan mal –al margen de la ley– echan mano de testaferros y simuladores.

 

GOBIERNO DEPREDADOR

Es importante señalar que los regidores de oposición deben defender –a capa y espada– que esos 42 millones de pesos no se vayan a unos cuantos bolsillos. Que mejor los utilicen en optimizar las canchas de la Ciudad Deportiva, que parece un auténtico leprosario debido a los malos manejos y valemadrismo de su patronato y directivos; que mejoren la Línea Verde que la actual administración municipal ha dejado morir de manera deliberada; que le metan lana al Centro Deportivo y Cultural La Jabonera. Incluso, los depredadores del gobierno municipal, también han venido acabando con el Paseo Morelos. En fin, hay bastantes lugares en donde utilizar (para beneficio de miles de torreonenses) esos 42 millones de pesos. Así las cosas pues.

 

Autor

Ramón Betancourt
Columnista