5 acciones para mejorar tu salud

A propósito del Día Internacional de la Salud, que se conmemoró el pasado 7 de abril, vale la pena recordar que tener o adquirir hábitos saludables contribuye a mantener una buena calidad de vida.

Para disfrutar de un estilo de vida en balance hay simples acciones que podemos incorporar a nuestra rutina. Ana María González, nutrióloga certificada por el Colegio Mexicano de Nutriólogos, comparte cinco pequeños cambios que en el día a día nos ayudarán a mantener un bienestar integral, con energía y con buenas defensas para no contraer enfermedades.

  1. Presta más atención a tu cuerpo. La prevención y la detección oportuna de cualquier padecimiento es clave para mantener un buen estado de salud. Es recomendable asistir al médico para realizar chequeos periódicos. Sobre todo, cuando algo te preocupa o presentas algún síntoma fuera de lo habitual. Recuerda que verte bien es sentirte bien, tu cuerpo te agradecerá hacer ejercicio regular, no pasar más de 90 minutos sin moverte, llevar una dieta equilibrada, manejo inteligente del estrés y abandonar los malos hábitos como fumar o el sedentarismo.
  1. Empieza a comer mejor. Llevar una alimentación equilibrada es esencial para mantenerte saludable. Una buena opción es hacer tres comidas principales y dos snacks o colaciones saludables entre ellas. Incluye en las tres comidas principales alimentos del grupo de cereales y tubérculos, muchos del grupo de verduras y frutas, y no olvides el grupo de leguminosas y productos de origen animal. Es decir, nunca dejes que pasen más de tres o cuatro horas sin consumir alimentos y, si sueles tener antojos, elige opciones de mejor calidad nutricional. Existe una gran oferta en el mercado de productos saludables, sin azúcar y bajos en calorías, así como verduras y frutas de temporada.
  1. ¡Hidrátate, aunque no tengas sed! El agua es fundamental para ayudar a nuestro organismo a recuperar la que perdemos a través de la orina y el sudor y a mantenerlo en buenas condiciones. Nunca esperes a tener sed para hidratarte, ¿Sabías que la sed es una señal de que ya estás empezando a deshidratarte? Según el Instituto de Medicina de las Academias Nacionales de Estados Unidos (IOM, por sus siglas en inglés), sólo el 20% de nuestro consumo total de líquidos proviene de alimentos con alto contenido de agua, como las frutas y las verduras, mientras que el 80% proviene del agua natural y otras bebidas, como leche, jugos de fruta, bebidas deportivas, etc. Recuerda que las bebidas que tienen cafeína no suman en la cuenta de la hidratación ya que son diuréticos. Opta por agua simple o bebidas bajas en calorías para cuidar tu consumo de azúcar y mantenerte en forma.
  1. ¡Muévete más! Cualquier persona que desea mejorar su salud, además de hacer ajustes en su alimentación, debe aumentar la cantidad de ejercicio físico que realiza. Practica algún deporte de forma habitual que te ayudará tanto a la salud cardiovascular como a mantener una buena masa muscular, realiza pequeñas acciones que te ayuden a mantener tu cuerpo activo, como bajarte una estación antes o dejar el auto más lejos para caminar, usar las escaleras en vez del elevador o realizar una rutina activa desde tu hogar, recuerda no pasar más de 90 minutos sentado, programa una alarma y haz una pequeña caminata o haz movimientos pequeños de estiramiento con el cuello, las manos, marchar sin desplazarte, etc. 
  1. Duerme lo suficiente. Es imposible vivir una vida saludable y plena sin dormir lo suficiente (7-8 horas diarias). Si dormimos poco o mal, aumenta el riesgo de padecer enfermedades, disminuye nuestra calidad de vida e, incluso, puede afectar nuestra alimentación. Un estudio publicado por la revista “American Journal of Clinical Nutrition” en enero de 2018, revela que dormir menos de seis horas, puede ser un factor que aumenta nuestro apetito e incrementa el deseo por consumir antojos, especialmente de alimentos dulces.