La educación se democratiza con el uso de las tecnologías: Grossmann

Rafael Grossmann, primer médico en el mundo en utilizar Google Glass en una cirugía, presentó en la UNAM avances tecnológicos encaminados a mejorar la relación médico-paciente, y la preparación de futuros profesionales del área 

Ciudad de México.- La única forma de democratizar la educación es con el uso de tecnologías, sobre todo en una época en que cinco mil millones de personas en el mundo no tienen acceso a cirugías seguras y asequibles, aseguró en la UNAM Rafael Grossmann Zamora, primer médico cirujano en el orbe que utilizó la tecnología de Google Glass (visor de realidad virtual) para operar.

Al participar en el Digital Health Forum Mexico, organizado por la Facultad de Medicina (FM) de la Universidad Nacional, Funsalud y la AMIIF (Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica), Grossmanndestacó la importancia de incluir el poder de la tecnología en el proceso de formación de los futuros médicos, por medio de simulaciones virtuales e innovaciones.

“La mejor manera de lograrlo es entrenar a más cirujanos, pues hay gran demanda de servicios en poblaciones donde las cifras de decesos son cada vez mayores”.

Además, las tecnologías son una poderosa herramienta para mejorar la relación médico-paciente; su uso en la salud reduce los errores médicos y mejora la eficacia de las intervenciones, puntualizó Grossmann Zamora.

El cirujano de origen venezolano afirmó que las naciones con menor desarrollo son los campos más fértiles para que la salud digital sea más veloz y trascendental, pues comúnmente tienen mayor potencial que países con altos ingresos.

Precisó que para optimizar la preparación de futuros doctores es necesario que los jóvenes tengan acceso a los avances tecnológicos, pero también deben incorporarse los gobiernos, universidades y administradores.

“Siempre se requieren agentes de cambio, como la Universidad Nacional, y deseo ser útil para que en México y Latinoamérica ocurra esta transformación con mayor rapidez”, comentó.

“He tenido contacto con Germán Fajardo –director de la FM– y otras autoridades de la UNAM. Tienen sed por mejorar su sistema, que de por sí ya es muy bueno, pues la Universidad Nacional es una de las 50 mejores del mundo. Hay tanto camino por recorrer, que hay que adaptar las tecnologías a las necesidades en México, tal vez en este momento no para la atención a la salud, pero sí para el sistema educativo”, subrayó.

El futuro hoy 

Grossmann es cirujano general con especialidad en trauma, laparoscopía avanzada y cirugía robótica, graduado de la Singularity University (SU), en Silicon Valley, en el programa de FutureMed. Además de dar clases, ejerce en Maine, Estados Unidos, donde ha tenido la oportunidad de conocer las nuevas y más avanzadas tecnologías, y sugerir a sus desarrolladores algunas modificaciones para su mejor uso.

Entre las nuevas tecnologías que Grossmann Zamora mostró en video, ante expertos y estudiantes, destacan sistemas de realidad virtual y realidad mixta VR-AR-XR, que permiten al usuario interactuar con el cuerpo humano, de la misma forma que en la cinta Real Player One.

Uno de esos sistemas, denominado Touch Surgery, presenta un atlas digital del cuerpo y enseña al usuario cómo hacer una mejor operación, mostrando los errores y educando de forma lúdica.

También VR Zone, tecnología creada para jugar, pero que es aprovechada en salas de terapia para que decenas de médicos la utilicen en la enseñanza. De igual manera, sistemas de realidad virtual que permiten a los pacientes interactuar con juegos o algunos ambientes, mientras les realizan procedimientos médicos.

Para ser un buen futurista es necesario ser un fanático de la ciencia ficción, porque se hace realidad después de unas décadas, comentó. “Ejemplo de ello es la cinta Terminator, de 1984; en ella se presenta un robot que, con inteligencia artificial, reconoce a personas y genera datos; en el presente esto es posible con lentes inteligentes”.

La tecnología es tan buena como el uso que se la dé, puede ser utilizada para dañar o para curar; “en nosotros está su aplicación, pues su único límite es la imaginación. En nuestro caso, estoy convencido de que nos puede dar más tiempo con el paciente, democratizando en cierto modo los servicios de salud”, destacó.

Entre los lentes de realidad mixta, mencionó los Magic Leap, considerados la última generación en su tipo, y pronto saldrá al mercado Hololens 2, que permitirán utilizar de forma intuitiva la tecnología para mejorar el tratamiento de los pacientes, además de que puede funcionar como un laboratorio interactivo para instruir y entrenar a los futuros cirujanos.

Un ejemplo de la tecnología de realidad mixta en educación médica es la empresa “MAHS”, de Turquía, que desarrolla avatares con los que se practica antes de revisar a un paciente; también están sistemas de simulación virtual para la enseñanza de cirugías y aprendizaje del control de las herramientas.

HaptX y SenseGlove son dos muestras de tecnología háptica, es decir, guantes que sumados a la realidad virtual permiten al usuario sentir, literalmente, objetos aun cuando no estén ahí; esto tiene gran potencial para la enseñanza, estimó el experto.

“¿Recuerdan los hologramas de Viaje a las Estrellas? El sistema VnTana ha creado hologramas para que dos personas hablen como si estuvieran juntas, sin estar en el mismo lugar. En tanto, el sistema MICA permite crear avatares que lucen prácticamente iguales a una persona”.

Finalmente, Grossmann mostró los sistemas InsightHearth, de la compañía Animares (Alemania), que han creado versiones anatómicas del corazón, pulmones y cerebro, con las que se puede aprender cómo funcionan estos órganos de forma realista, incluso desde teléfonos inteligentes.

Para mayor información sobre el tema contactar al experto a través de su cuenta de twitter @ZGJR o en el sitio www.rafaelgrossmann.com. (UNAM)