OPINIÓN

ENTRE LA ESPERANZA Y LA EDUCACIÓN

Por

4 abril, 2019

JUAN ANTONIO MARTÍNEZ BARRIOS

Los oradores se suceden uno tras otro. Todos hablan de la necesidad de apoyos para el campo y del olvido en que los han tenido los últimos gobiernos. La concurrencia se desespera, a gritos les hacen ver que ya todos saben cuáles son los padecimientos agrarios; demandan propuestas y compromisos específicos. En el presídium destacan los bigotes del empresario senador Armando Guadiana, quien intenta convencerlos de que es uno más de ellos pues confiesa que la última helada lo hizo perder sus cultivos de manzana en Arteaga.

Se trata de un foro que persigue la siempre pospuesta reactivación del campo. Los organizadores son simpatizantes del partido Morena o más bien de Andrés Manuel López Obrador. “Sepan que contaremos con el apoyo de Andrés Manuel López Obrador”, les patentiza el empresario ex priista. Hay muchos compromisos con la Región Lagunera y durante los próximos seis años, de la mano con López Obrador, se lograrán los grandes cambios que el sector agropecuario requiere con urgencia.

Había llegado yo con anticipación a la Infoteca Municipal de Francisco I. Madero, lugar de la congregación de organizaciones campesinas principalmente del municipio sede, pero también de Torreón, San Pedro y Matamoros. Atiendo la invitación con cierto morbo periodístico. A los campesinos los mueve la quimera de que López Obrador les dará todo el apoyo que necesita el campo, que habrá créditos suficientes y mucha agua; en suma, que les resolverá todas sus carencias y problemas.

Las propuestas parecen interminables. Al fin, los organizadores determinan un receso. Se distribuyen bocadillos, refrescos y café. En el área de estacionamiento, los asistentes estiran las piernas. Me encuentro un amigo, periodista retirado del medio, metido de defensor de campesinos en Viesca. “No, yo no creo en estas reuniones; los organizadores lo que buscan son puestos, acomodarse en el nuevo gobierno federal”, me dice. Me presentan a un vecino de Charcos de Risa, que llegó en una vieja camioneta. De cuerpo enjuto y grandes pómulos pero que no pierde el entusiasmo.

Vuelven a ingresar en el recinto. Las ponencias continúan. Agua, créditos, la creación de una nueva organización campesina que sepulte a la priista CNC. En los pasillos y área de estacionamiento ahora hay tal cantidad de basura que pareciera no se ha barrido en cinco años.

Me retiro pensando que lo que al sector campesino le urge es educación en todos los sentidos.