CAFÉ POLÍTICO

“PERDÓN ESPAÑOL”

Dado que el tema sobre el “perdón español” que ha exigido AMLO continúa siendo fondo y forma en los serpentarios políticos con aíre acondicionado (cafés, bares y restaurantes), paso de inmediato a abundar en la materia. Ok. El que el presidente Andrés Manuel López Obrador haya exigido disculpas a España por los excesos cometidos por la conquista, es una petición absurda y extemporánea. Esta penúltima ocurrencia de AMLO (la última es su pretensión de llevarse la cuenca lechera de La Laguna a Tabasco), nos hace recordar que en 1519 México no era un país con un poder central. México se componía de señoríos –en este caso indígenas–, sobresaliendo los Aztecas que dominaban parte del centro del país e incluso, las tribus que tenían dominadas les pagaban tributo. Cabe destacar que así como el presidente quiere, bajo su proyecto de Cuarta Transformación, parecerse o igualar a Juárez, Madero o a Cárdenas, con este tipo de eventos como es el exigir perdón, se hace acreedor a críticas que le restan puntos a su imagen y gobierno. Poco después de este desvaríe y descalabro, AMLO tuvo otra gansada (me canso ganso) al decir que se llevaría la cuenca lechera de la región lagunera al sureste del país (Tabasco) ya que el “Río Usumacinta lleva mucha agua”.

 

FLORES HURTADO

Quizá Andrés Manuel lanzó este segundo ofrecimiento –como cortina de humo–, para tratar de desviar las críticas hacía su imprudente pretensión del “perdón español”. A raíz de ello, de inmediato sale en escena el súper delegado Reyes Flores Hurtado, hombre y señor dominante de todos y cada uno de los temas políticos, sociales, económicos y financieros que se debaten no solo en Coahuila, sino en todo el país; es decir, a nivel nacional. Vamos, su labor como jefazo de programas sociales en Coahuila le quedó muy chiquito ya que Flores Hurtado se mete en todo, comenta de todo y le hace de todo; hasta de intérprete del Presidente cuando este la riega (cuenca lechera). El caso es que Reyes en los videos que sube a las redes sociales, piensa que el pueblo es retraído. Y que los mexicanos y coahuilenses que escucharon a López Obrador sobre el tema de la cuenca lechera, él tratara de desvirtuarlo con tal de enmendarle la plana al Preciso. Huelga decir que la sobre representación de Flores Hurtado, así como su declaracionitis –es buen muchacho, buen abogado, buen político, pero muy sobreactuado–, harán que cometa errores uno tras otro y vaya perdiendo punch y presencia rumbo a la candidatura a la alcaldía de Torreón. Por si fuera poco, su pleito y distanciamiento con su padrino y gurú político, el senador Santana Armando Guadiana Tijerina, nada bueno le traerá.

 

TODOS PIDÁMONOS PERDÓN

Volviendo con el tema de la conquista. Pues de una vez que todo mundo se agarre de las ocurrencia de Andrés Manuel. Y así por ejemplo; que España exija disculpas a Francia por lo que les hizo Napoleón, al invadirlos en 1808 y obligar abdicar al Rey Carlos IV y a su hijo Felipe VII para proclamar a su hermano José Bonaparte como Rey de España con el nombre de José I. O que Francia le pida perdón a Italia por lo de las Galias, que fue el conflicto armado entre el ejército romano de Julio César al invadir y someter a las tribus galas (Francia) poco antes del nacimiento de Cristo. O que España pida que se arrodillen los árabes que los invadieron ya que tropas musulmanas, compuestas por árabes y beréberes, cruzaron el estrecho de Gibraltar en el año 711 iniciando la conquista de la península ibérica, durando su dominio larguísimos 800 años. O que México (AMLO) exija que los EE.UU. (Trump) se postren, se humillen y pidan perdón y devuelvan gran parte de nuestro territorio, como los actuales estados de California, Nevada, Nuevo México, Texas y Utah, entre otros. Recordar que México perdió más de 2 millones de kilómetros cuadrados con la firma del leonino e inmoral Tratado de Guadalupe Hidalgo.

 

TLAXCALA, ZEMPOALA Y CHOLULA

Ahora bien, vale recordar que hubo tribus indígenas que ayudaron a Cortés en la conquista: Tlaxcala, Zempoala y Cholula. Como estas tres tribus eran perseguidos, ultrajados y sus corazones sacados para ofrecerlos a las deidades del sol, aíre, agua y tierra en Tenochtitlán (miles y miles de sacrificios en auténticos rastros malolientes, repugnantes y asquerosos de sangre y carne), o los tomaban por esclavos; entonces estas 3 tribus de indígenas originarios mexicanos, le cobraron la factura a los Mexicas que eran los que mandaban en aquellos años. Entonces habría que pedir a los pobladores de estos tres municipios de los estados de Tlaxcala, Hidalgo y Puebla, que pidan perdón a los indígenas Mexicas y a su larga descendencia  por haber apoyado a Hernán Cortés.

 

QUE NO AFECTE LA RELACIÓN

Ahora bien, es mucha coincidencia el que a la víspera de que su esposa Beatríz Gutiérrez presentara su libro “La memoria artificial en la historia verdadera de la Conquista de la Nueva España de Bernal Díaz del Castillo” (que originalmente nació como su tesis), Andrés Manuel haya emitido el comunicado a España que dicho sea de paso, se asegura que salió no de Palacio Nacional, sino de la casa de la pareja presidencial. ¿Más que exigir el perdón español, no sería que AMLO quiso promocionar la venta del libro de su cónyuge? Ok. Vayámonos acostumbrando pues a que este gobierno será de acciones personalísimas y de caprichos. Sería lamentable que al igual como sucedió en el gobierno de Fox, cuando compartió  la Presidencia mediante un cogobierno con su esposa Martha Sahagún, en este sucediese lo mismo. Ojala y la polvareda que levantó AMLO con el “perdón español”, solo sea una broma de mal gusto que no afecte la relación bilateral entre ambos países.

 

GANA OMAR FAYAD

Por cierto, los descendientes de Hernán Cortés y los conquistadores viven aquí en México, en todo el territorio nacional. Entonces que Andrés Manuel no vaya tan lejos y que a ellos les pida perdón. Vale recordar que el entonces Rey Juan Carlos I ofreció disculpas durante el Día de la Hispanidad por los excesos y opresiones que se dieron durante la conquista y la colonia. Eso fue en 1990 cuando era Presidente de México, Carlos Salinas de Gortari, quien sin pedírselo, Juan Carlos I ofreció testimonio y perdón. Incluso, España ya lo había hecho en dos ocasiones anteriores, en 1836 y en 1910. Es decir, exigir que por cuarta vez España pida perdón, se entiende más que por una verdadera reivindicación histórica a favor de las tribus indígenas originarias, si como una cortina de humo para desviar la atención sobre un gobierno que no acaba de permear y aterrizar su proyecto de 4T. Por cierto, el primer gobernador que le gana a López Obrador en el aplausómetro público, fue antier en Huejutla, Hidalgo — de donde es la tribu Totonaca de Zempoala–. Fue el Gober Omar  Fayad quien le ganó de calle los aplausos y las porras al Preciso que no acababa de sorprenderse lo que estaba pasando. Y es que las porras morenas fueron aplacadas a las primeras de cambio por las porras del gobernador.

 

“SEGUNDA CONQUISTA”

Por último. Transcribo textualmente un párrafo del acreditado periodista Carlos Ramírez. “Benito Juárez fue un indígena zapoteco que nació en el pueblo de Guelatao, en el estado de Oaxaca en el sureste mexicano, pero se educó en las instituciones españolas. Durante sus presidencias 1857-1872 fundó el Estado-nación y sentó las bases del modelo económico capitalista basado en la propiedad privada. Para ello, tuvo que desamortizar los bienes inmuebles de la iglesia católica que había acumulado terrenos y casas, pero también expropió enormes propiedades de tierras indígenas que sus dueños tenían inactivas “porque aquí estaban enterrados nuestros ancestros”. La expropiación de bienes de la iglesia y de los campesinos provocó alzamientos de los afectados, pero Juárez no vaciló en usar al ejército para reprimir. Por la forma en que el presidente indígena aplastó las protestas indígenas se habló por historiadores de una “segunda conquista”. Así las cosas.

 

Autor

Ramón Betancourt
Columnista