UNOS CONTRA OTROS

 

No lo conozco.

Tras tantos años, no sé quién es él,  como tampoco él sabe quién soy yo.

¿Cómo pueden dos personas detestarse tanto,  si ni siquiera se conocen?

-Batman refiriéndose al Joker 

El respeto a la investidura presidencial debe ser de todos. Una cosa es señalar y criticar su desempeño en el trabajo y otra meterse en lo privado, como hablar de su hijo menor, de su esposa o referirse al físico, usando frases como cabecita de algodón entre otras.

Pero ¿por qué a la investidura? El respeto debe ser para cualquier ser humano e instituciones, no sólo al presidente. La senadora Jesusa llama idiotas en pocas palabras a quien profesa la religión católica; la senadora Galaz les dice retrasados mentales a los reporteros; Noroña insulta y denosta a quien se le pone enfrente; la legisladora Trasviña que pedía no caer en descalificaciones, no habían pasado 3 segundos cuando cayó en ellas; Salgado Macedonio, cada que tiene un micrófono en frente arremete contra otras instituciones “amenazando” su desaparición y el Presidente ni se diga, a quien discierne le llama fifí, entre muchos otros adjetivos que si me pongo a escribirlos no acabo.

Estoy de acuerdo AMLO y MORENA ganaron con la mayoría, pero eso no les da derecho a tener a la minoría con el brazo torcido, atemorizada y/o amenazada.

El autoritarismo es la fuerza de unos pocos que gobiernan sobre los demás, es el puño del niño de primaria que amenaza a otro más débil, el cuchillo que atemoriza a quien va a ser asaltado, la pistola que obliga.

¿Qué estarán pensando? ¿Se creen dueños de la razón? ¿Poseedores de la verdad? ¿En realidad todo el que no milita en MORENA es corrupto? ¿Traidores a la Patria?

En los eventos a los que va López Obrador, su partido organiza abucheos contra los “antagónicos” políticos, pero, cuando abuchean a AMLO, de manera espontánea como fue en el juego de béisbol de los Diablos Rojos, creyeron y dan por cierto que alguien pagó, acarreó y orquestó el repudio hacia la figura Presidencial.

El país esta enconado entre los que apoyan a AMLO y entre los que no; fifís contra chairos. En automático estás de un lado o del otro, héroe o villano, aclaro que no soy fifí ni chairo. Esto va a generar heridas difíciles y tardadas en sanar. Hoy en día, después de más de 150 años no sanan las inferidas entre conservadores y liberales, el daño a un país puede ser económico, político, pero el social es el más duro, el más profundo y el más doloroso. Cada vez la reconciliación se ve más lejana y mientras más lejos esté, más cerca va a estar la intolerancia y ésta siempre nos lleva al odio que a la vez nos conduce a cosas peores. Lo más grave de un país, es vivir unos contra otros como si los unos o los otros fueran el extraño enemigo.

Si te vas a dedicar a la política la piel sensible no te sirve, si no te gusta que te critiquen, no le entres, si crees que todo son ovaciones, estás equivocado.

Quien gobierna por aplausos, gobierna efímeramente. A todos los políticos, piel más gruesa y más acciones, cuero más duro y más resultados.

En efecto, el respeto a las autoridades debe ser una constante en una sociedad civilizada, pero diputados, senadores, o cualquier otro funcionario público hasta el Presidente, tiene la más férrea obligación de respetarnos.

P.D. Que nos respeten las autoridades es bueno y nosotros a ellas también, pero, sobre todo; respetémonos todos como mexicanos.

Hasta la vista baby.