Maduro enfrenta nuevo desafío en Venezuela: el regreso de Guaidó


Caracas.- El líder opositor venezolano Juan Guaidó regresará a Venezuela esta semana desde Colombia, desafiando al presidente Nicolás Maduro, que deberá decidir la siguiente jugada después de que -su cada vez más popular crítico- violara una prohibición judicial de salir del país.

Guaidó, un ingeniero de 35 años que se proclamó presidente encargado en enero y ha sido reconocido por decenas de países, viajó la semana pasada a la vecina nación para presionar por el ingreso de ayuda humanitaria a la nación petrolera, señaló el periódico El Financiero.

Después de mantener reuniones en Bogotá con líderes de la región y el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se espera que Guaidó regrese a sus actividades tras su abierto desafío al fallo del Tribunal Supremo de Justicia, que le prohibió a fines de enero cruzar las fronteras.

Ahora Maduro tendrá que decidir si causa un escándalo internacional intentando arrestar al opositor o si permite que Guaidó, jefe del Congreso dominado por la oposición, ignore las órdenes de instituciones vinculadas al gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), erosionando su autoridad.

Maduro dijo que el opositor venezolano debe «respetar la ley» y que si regresa al país «tendrá que ver la cara de la justicia», según una reciente entrevista con la cadena ABC.

«Es un gran problema para el gobierno manejar el tema Guaidó porque le creció políticamente demasiado», dijo Luis Salamanca, politólogo y profesor de Derecho Constitucional de la Universidad Central de Venezuela.

Guaidó invocó la Constitución para asumir el 23 de enero pasado la presidencia interina del país, declarando a Maduro un usurpador por haber sido reelegido en mayo del año pasado en una votación ampliamente boicoteada por la oposición y descrita por buenas partes de la comunidad internacional como una farsa.

Instituciones como la Fiscalía General, el Tribunal Supremo y la Contraloría, todas abiertamente aliadas con Maduro, abrieron investigaciones a Guaidó en las últimas semanas.

Pero ninguna de ellas ha buscado su arresto ni lo ha acusado formalmente. Hasta ahora, las autoridades han congelado sus cuentas bancarias y le han prohibido los viajes al extranjero.

El Ministerio de Información de Venezuela no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.

«Desearía que vuelva», dijo Martha Sánchez, una recepcionista de 65 años que confesó haber bajado de peso porque no le alcanza su salario equivalente a 10 dólares mensuales. «Ha demostrado ser un político con empuje y que nos ha dado esperanza».

El gobierno de Maduro le ha permitido en gran medida llevar a cabo actividades políticas, como mítines y conferencias de prensa, pero parece poco dispuesto a encarcelarlo, incluso ahora que se ha mostrado en rebelión a restricciones legales.

Maduro «tiene mucho más que perder al detener a Guaidó que dejarlo entrar», dijo el analista político Dimitris Pantoulas.

«La detención del Guaidó sería un acto que pondría al mundo de tomar decisiones urgentes y contundentes lo más pronto posible, y con los ojos todos puestos en Venezuela (…) estas acciones serían muy fuertes contra él (Maduro)», explicó. (EL FINANCIERO)