Alcanzar una total independencia es uno de los sueños de millones de mexicanos. Según los últimos datos, el 94% de la población pretende comprar una vivienda para convertirse en dueños de su propia casa. Una meta que depende de múltiples factores, aunque principalmente de las condiciones económicas de cada persona. El precio promedio de una vivienda en el país fue de 744,943 pesos durante el paso pasado, según señala la Sociedad Hipotecaria Federal. Por este motivo, los desarrollos Quiero Casa se convierten en una herramienta realmente útil para cumplir el deseo de tener un hogar propio de una forma sencilla y asequible.
La compra de una vivienda, ya sea de segunda mano o de nueva construcción, es una de las decisiones más importantes en la vida de cualquier persona, porque se trata de la mayor inversión. Al mismo tiempo, los compradores deben tener presentes el problema que existe actualmente en la Ciudad de México, ya que no hay suficientes superficies para construir y la población sigue creciendo. Una serie de elementos que han ocasionado un aumento de la demanda y del precio. Para acertar en esta decisión transcendental es importante fijarse en una serie de factores que determinarán finalmente el éxito de esta adquisición.
Establecer el precio máximo para adquirir la casa
El primer paso antes de comprar una vivienda es definir exactamente el precio máximo disponible que se está dispuesto a gastar. Uno de los factores más determinantes en este aspecto es que la cuota de la hipoteca nunca debe superar el 30% o 35% de los ingresos fijos mensuales, para que siempre quede dinero suficiente para hacer frente a otros cargos habituales en cualquier unidad familiar. A esa cifra mágica siempre hay que sumarle los ahorros acumulados, siempre que se tengan, durante los últimos años.
Decidir el tipo de vivienda
El mercado inmobiliario ofrece distintos tipos de viviendas que se adaptan a las necesidades de la población. De esta forma, se pueden encontrar casas de nueva construcción, de segunda mano en buen estado o de segunda mano a reformar. En el primer caso, el comprador tendrá que pagar una mayor cantidad de dinero, pero adquiere un inmueble de obra nueva con múltiples ventajas. Por otro lado, las casas de segunda mano pueden conseguirse por un precio mucho más reducido, pero cuenta con un desgaste notable por el paso de los años.
Elige la localización de la vivienda
La localización es uno de los factores más importantes de una propiedad inmobiliaria. Hay que tener en cuenta que el precio promedio de una casa en la Ciudad de México es de 8,057,000 pesos, mientras que un apartamento alcanza los 6,574,000 pesos, es decir, los precios inmobiliarios más altos de todo el país. En cualquier caso, el lugar donde esté ubicada la vivienda será determinante para conocer el valor exacto. Más allá del aspecto económico, la cercanía al centro de trabajo o lugares de ocio son elementos imprescindibles para elegir la zona ideal donde se quiere comprar una casa de ensueño.
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