Expresa RMS su desacuerdo con AMLO en torno a prohibir el fracking

Rogelio Montemayor, presidente del Clúster de Energía Coahuila, A.C., manifestó su desacuerdo sobre las declaraciones del presidente Andrés Manuel López Obrador durante su toma de protesta, de que prohibirá en México la técnica de fracturación hidráulica (fracking).

“Vivimos en un Estado de Derecho. En este contexto, cualquier decisión de las autoridades que afecten a los ciudadanos, positiva o negativamente, deben ser motivadas, en cuanto a las razones que le mueven a tomar dicha decisión, y fundadas en la ley que les faculta para tomar dicha decisión. En este caso, lo mencionado por el presidente de la República en relación a no permitir el uso de la técnica de fracturación hidráulica en la explotación de hidrocarburos, expresado al rendir la protesta de ley para asumir dicho cargo, no explica las razones ni los fundamentos legales para tomar tal decisión. Será necesario que lo haga, pues el presidente protestó guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes que de ella emanan, y se comprometió a mirar en todo por el bien y prosperidad del país”, señaló Montemayor Seguy en un comunicado.

“A reserva de que el Presidente nos dé a conocer, en los días o semanas siguientes, las razones y el fundamento legal que lo lleva a tal decisión, en cuyo momento se evaluarán las opciones de acción que la ley permita para defender los intereses de México, a continuación expresamos las siguientes razones para estar en desacuerdo con tal decisión” añade el comunicado, al cual se agrega la lista de razones expresada por Montemayor:

México tiene una elevada dependencia del gas para generar la electricidad necesaria para la vida y las actividades económicas de más de 120 millones de mexicanos. Casi 70% de la electricidad que consumimos se genera con gas.

México importa más de 80% de ese gas, principalmente de EUA, de Texas.

Dado que los mercados del gas son básicamente mercados regionales, pues la forma más económica de transporte del gas es por ducto, cualquier interrupción del suministro de EUA paralizaría las actividades económicas del país y afectarían la vida de manera muy severa. No hay inventarios de gas para hacer frente a una contingencia como esta. Tampoco contamos con otra fuente de energía que sustituya, en el corto plazo, la electricidad que necesitamos.

Esta dependencia de México respecto de la importación de gas es grave, es de la mayor importancia atenderla a la brevedad posible. Es un asunto de seguridad y soberanía nacional.

México cuenta con importantes recursos prospectivos de gas, ocupa el sexto lugar en el mundo por su volumen.

México puede, con la inversión necesaria, de Pemex y empresas privadas, reducir esa dependencia y estamos obligados a hacerlo.

Elevar la producción de gas y crudo requiere invertir en exploración y producción, a pasos acelerados. Se requiere también usar las técnicas que utiliza la industria a nivel mundial. Y ello incluye la fracturación hidráulica, necesaria para desarrollar los recursos no convencionales de hidrocarburos (lutitas o shale, entre ellos) y la mayor parte de los convencionales.

Prohibir el uso de esta técnica sería condenar a México a seguir importando gas y lo más seguro gasolinas y diésel, pues la producción nacional estaría condenada a seguir disminuyendo.

El gas es el combustible más limpio de los energéticos fósiles. Es incongruente promover el uso de más carbón, el energético fósil más contaminante de todos, para generar electricidad y pretender prohibir el uso de fracking para producir gas.

Los riesgos para el medio ambiente que su explotación puede conllevar, son prevenibles y manejables con tecnología, la cual ya existe y se usa en México. Nuestra regulación es apropiada y sólida.

Sería un suicidio económico si el nuevo gobierno decide llevar a la ley la prohibición de uso de esta técnica. Perderíamos todos, incluido el medio ambiente, nadie ganaría. (EL HERALDO)