Trump responde a grandes donadores republicanos tras crítica 

(Xinhua/Liu Jie)

Washington.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recurrió este martes a Twitter para responder a los multimillonarios donadores quienes dijeron que dejarán de apoyar a un candidato republicano antes de las elecciones de mitad de periodo.

Los hermanos Koch, Charles y David, son la segunda generación de propietarios de un imperio de energía estadounidense que tiene ingresos anuales de 115.000 millones de dólares. Tienen una amplia participación en la política de Estados Unidos, donde influyen en las elecciones y en la determinación de la política a través de cheques abultados.

«Los globalistas hermanos Koch, quienes se han vuelto completos objetos de burla en los círculos republicanos reales, se oponen a Fronteras Fuertes y a Comercio Poderoso. Yo nunca busqué su apoyo porque no necesito su dinero ni malas ideas», tuiteó Trump.

«Los hice más ricos. Su red está sobrevalorada… Ellos desean proteger a sus compañías fuera de Estados Unidos de ser gravadas. Estoy a favor de Estados Unidos Primero y del Trabajador Estadounidense… no soy títere de nadie. Dos buenos tipos con malas ideas. ¡Hacer Grande de Nuevo a Estados Unidos!», agregó en el tuit de dos partes.

La burla pública tuvo lugar un día después de que una red política formada por los hermanos Koch dijera que no apoyaría a un candidato republicano al Senado en el estado de Dakota del Norte en las elecciones de mitad de periodo debido a su historial de apoyo al gasto federal.

Tim Phillips, presidente de la red Estadounidenses por la Prosperidad, criticó ante un grupo de donadores el lunes al representante Kevin Cramer, quien está buscando desbancar a la senadora demócrata del estado, Heidi Heitkamp.

«No podemos apoyarlo en este momento y nos hemos reunido con su equipo, explicado esto y cabildeado sobre esto con ellos», declaró Phillips.

De acuerdo con sus intereses corporativos, los hermanos Koch la mayoría de las veces cabildean en pro de la reducción de impuestos y del gasto federal, así como por una baja supervisión de regulación de las empresas. (XINHUA)