Sin Zidane ni Cristiano, el Real Madrid encara una «revolución» 

 Foto: Matthias Balk/dpa 

Por Alberto Bravo

Madrid – Primero fue Zinedine Zidane y ahora Cristiano Ronaldo. Sin la presencia de sus dos grandes líderes de los últimos años, el Real Madrid se encontró en una situación impensada hace sólo dos meses: impulsar una reconstrucción y la necesidad de acertar con sus decisiones.

Es difícil asumir que alguien se quiera ir de un club que recuperó el aroma de su vieja leyenda con la epopéyica conquista de tres Ligas de Campeones consecutivas y cuatro en cinco años, pero esa es la cruda realidad para un Real Madrid que a corto plazo necesita insuflar ilusión en su hinchada y obtener resultados tangibles en el largo plazo.

La primera decisión trascendente -y con no poca polémica- fue la contratación del técnico Julen Lopetegui, un acuerdo que desembocó en el despido del ex seleccionador español a apenas dos días de su debut en el Mundial más una cascada de críticas tanto para él como para el presidente blanco, Florentino Pérez.

Para fortuna de éste, pudo contar con el entrenador un mes antes de lo pensado y además se ahorró los dos millones de euros de la cláusula de rescisión al tratarse de un despido.

Lopetegui, sin el carisma ni la ascendencia de Zidane sobre hinchada y jugadores, deberá ayudar a Pérez a diseñar un equipo que siga siendo ganador a pesar de perder a su gran estrella y a los casi 50 goles que prácticamente garantizaba Cristiano Ronaldo cada temporada.

El Real Madrid vendió al portugués por 112 millones de euros, aunque pagaderos en dos plazos. No es tanto lo que tiene para gastar en fichajes por esta vía. Otra cosa es el secreto mejor guardado por Pérez: ¿De cuánto dinero dispone en sus reservas para fichar?

El campeón de Europa hizo su última gran inversión hace justo cuatro años, cuando pagó 80 millones de euros por el colombiano James Rodríguez, actualmente en el Bayern Múnich, que en breve pagará 45 millones de euros al Real Madrid para completar el traspaso. Durante los últimos años entró en «modo ahorro» y no le fue nada mal con los éxitos repetidos en la Liga de Campeones.

Foto: Ina Fassbender/dpa

Ahora la cuestión es saber cuál es la idea de proyecto de Pérez y Lopetegui. Y más concretamente: ¿Fichará a un «galáctico» tipo Neymar o Kylian Mbappé, o más bien elegirá jugadores estelares, pero sin la categoría de mediáticos?

Mientras tanto, el club asegura que la salida de Cristiano Ronaldo podría servir en bandeja de plata el anhelo de Gareth Bale para ser la referencia del equipo. Una apuesta arriesgada en cualquier caso, pues se trata de un futbolista con un físico de cristal y sin regularidad en los cinco años que lleva en Madrid.

Otra interrogante es ver qué grado de protagonismo concede Lopetegui a futbolistas jóvenes como Marco Asensio, Dani Ceballos, Jesús Vallejo, Theo Hernández y otros. Y si están preparados para dar el salto adelante. De momento, el Real Madrid ya cerró la contratación del lateral derecho Álvaro Odriozola y, además, el brasileño Vinicius, de 17 años, hará la pretemporada.

Son momentos ciertamente confusos para el Real Madrid, un sentimiento de orfandad tras la marcha voluntaria de dos leyendas como Zidane y Cristiano Ronaldo. El proyecto está en cuestión y en los próximos días los periódicos se llenarán con nombres como los de Neymar, Mbappé, Eden Hazard, Thibout Courtois, Harry Kane y muchos más.

Al menos, esta vez el Real Madrid cuenta con dos aspectos interesantes para su reconstrucción: lo hará al amparo de sus tres Ligas de Campeones y todavía posee jugadores estelares como Luka Modric, Isco, Toni Kroos y muchos más. Es decir, no reconstruirá desde la nada. (DPA)