Consejo de Derechos Humanos encuentra que hay evidencia de ataque con gas tóxico en Duma

Ginebra.- En la ciudad siria de Duma, que permaneció largo tiempo bajo control rebelde, se utilizó gas venenoso en un ataque contra la población en abril, según un informe presentado este miércoles en Ginebra en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

Las pruebas disponibles apuntan al uso de gas cloro, según un informe referido a los combates en torno a la zona rebelde de Guta Oriental, cerca de la capital siria, Damasco. Los síntomas de los heridos coinciden con los de una exposición a una sustancia química, muy probablemente un gas nervioso, señala el texto.

En el ataque del 7 de abril murieron decenas de personas. El Consejo de Derechos Humanos habla de 49 muertos y hasta 650 heridos. La oposición y los países occidentales acusaron del hecho a las tropas del Gobierno sirio. A causa de ello Estados Unidos, Francia y Reino Unido bombardearon posiciones del Ejército sirio.

Siria y su principal aliada, Rusia, rechazaron las acusaciones y hablaron de un «ataque fabricado». Los seguidores del presidente sirio, Bashar al Assad, niegan que en Duma se haya utilizado siquiera gas nervioso. Inspectores de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) llevaron a cabo una investigación pero aún no han presentado un informe.

El Consejo de Derechos Humanos acusa además a las tropas de Al Assad de crímenes contra la humanidad en su avance sobre Guta Oriental, aunque también los grupos armados opositores cometieron crímenes de guerra, subraya.

Las tropas gubernamentales bombardearon de forma sistemática las zonas residenciales, inclusive hospitales y escuelas, e hicieron pasar hambre a los pobladores al impedir la entrada de medicinas y alimentos al área sitiada, señalan los expertos.

El Consejo cita como ejemplo el hecho de que en marzo un puesto de control del Gobierno obligó a un convoy de asistencia humanitaria a abandonar el 70 por ciento de su carga de medicinas a bordo de 46 camiones. Varios niños de Guta Oriental murieron a causa de enfermedades prevenibles.

A su vez, en el informe se destaca que los grupos armados opositores bombardearon Damasco de forma indiscriminada con cohetes de fabricación casera que no eran capaces de alcanzar con exactitud su verdadero objetivo. En uno de los ataques murieron al menos 44 civiles. Además, los grupos armados detuvieron y torturaron a civiles de manera arbitraria.

Guta Oriental, ubicada al este de Damasco, fue zona de combate durante semanas en una de las batallas más sangrientas de la guerra civil siria. Decenas de miles de civiles tuvieron que ocultarse en sótanos ante los intensos ataques y cientos murieron. Debido al bloqueo había escasez de alimentos, agua y medicinas. A mediados de abril el Gobierno consiguió conquistar la zona.

Según el Consejo de Derechos Humanos, unas 140.000 personas fueron expulsadas de Guta Oriental. Unas 30.000 siguen encerradas de manera ilegal en campos a las afueras de Damasco. (DPA)