EN EL TINTERO

JESSICA ROSALES 

Una barridita 

Una barridita con pirul o de preferencia el árbol completo es lo que necesita el experredista hoy militante de Morena, Gustavo de la Rosa Ramírez, quien por más intentos que hace para ser alcalde de Ocampo, no tiene a la suerte de su lado.

Desde el año pasado, Gustavo se volvió del grupo de “Los Arcoiris”, que no tiene nada que ver con las agrupaciones LGTBI. Como lo comenté en la colaboración anterior de En el tintero, ahora así les apodan a aquellos políticos que por intereses personales deciden cambiar de un instituto político a otro y por lo tanto de color partidista.

Tras pelear con la dirigencia del Partido del Sol Azteca, -para ser más específicos con Mary Telma Guajardo-, Gustavo renunció a su militancia en el PRD para ofrecer sus activos a Morena que lo designó el año pasado como su candidato a la alcaldía de Ocampo, pero tras una impugnación, la Sala Regional Monterrey le echó abajo la postulación y la cedió a Brenda Yanet Trejo Bernal.

Finalmente ganó la candidata de Movimiento Ciudadano, Arcedalia Ramírez, quien ya en el poder se cambió a las filas de Morena, un golpe de suerte para ese partido, pero no para Gustavo quien terminó peleado también con la alcaldesa.

Ha tenido varios desencuentros, primero con Mary Telma, luego con Brenda, después con Arcedalia, y ahora, es otra mujer la que tiene en vilo al ex perredista.

El jueves el Tribunal Electoral de Coahuila emitió la sentencia 26/2018 en la que revoca la candidatura de Gustavo de la Rosa para la alcaldía de Ocampo, otra vez.

Como parte del Juicio para la protección de los derechos políticos electorales en su expediente 45/2018, Jovita López Pérez, impugnó la decisión de la Comisión Nacional de Honor y Justicia del Comité Nacional de Morena de otorgar la candidatura a Gustavo, y por decisión unánime, los magistrados le dieron la razón.

“El género que debe prevalecer para la candidatura del Municipio de Ocampo, Coahuila, es el mismo que el del proceso electoral inmediato anterior, es decir, el femenino, toda vez que la Sala Regional Monterrey, en ese proceso electoral, ya había reparado el indebido cambio de género al momento de la candidatura de Gustavo de la Rosa”, señala la sentencia.

Que mala suerte para Gustavo de la Rosa, y aunque aún puede acudir a otra instancia lo cierto es que lo sigue la mala suerte. Podrían pasar otros tres años para que pueda participar activamente en otra contienda, pero se puede quejar, si Andrés Manuel López Obrador espero 12 años, que tanto son otros tres para él.

Díganle que por lo menos prenda incienso de vez en cuando para alejar las malas vibras y la energía negativa, o ya de perdido que le rece a algún santo, porque definitivamente la suerte hoy no está de su lado.