22 mil millones de dólares en diez años: el costo de las pérdidas agrícolas por desastres en América Latina y el Caribe

Sequías tuvieron el mayor impacto en la región según un nuevo informe de la FAO. CELAC publicó el texto de su estrategia regional de reducción del riesgo de desastres.

Santiago de Chile – En América Latina y el Caribe, la sequía fue el tipo de desastre más costoso entre 2005 y 2015, causando pérdidas en los cultivos y el ganado de US 13 000 millones de dólares, según un nuevo informe (disponible en inglés) de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

La agricultura de América Latina y el Caribe fue la tercera más golpeada por desastres en el mundo, después de la de África y Asia, con pérdidas que alcanzaron 22 mil millones de dólares en un periodo de diez años.

En la región las pérdidas agrícolas aumentaron considerablemente entre 2010 y 2015, con auges pronunciados en 2012 y 2014 producto de severos episodios de sequía relacionados con La Niña, que devastó las cosechas de cultivos en Argentina y Brasil en 2012 y gran parte de Centroamérica en 2014, especialmente los cultivos y ganadería en El Salvador, Guatemala y Honduras.

En términos de cultivos, los más afectados por desastres entre 2005 y 2015 fueron las leguminosas como frijoles, lentejas y garbanzos, con pérdidas cercanas a los USD 8 000 millones de dólares.

AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE ESTÁN MEJOR

Para prevenir la aparición de nuevos riesgos de desastres y reducir los existentes la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), creó su Estrategia de Gestión del Riesgo de Desastres en el Sector Agrícola y la Seguridad Alimentaria, cuyo texto completo se puede consultar desde hoy.

La estrategia cubre el periodo 2017-2030 y propone medidas integradas e inclusivas de índole económica, financiera, jurídica, social, ambiental y tecnológica para reforzar la resiliencia de los países y sus comunidades.

La estrategia también permitirá a los países abordar de manera integral las amenazas transfronterizas y trabajar de forma conjunta en espacios geográficos con características agroecológicas comunes.

Tiene cuatro prioridades: comprender el riesgo de desastres; fortalecer la gobernanza del riesgo; invertir en la reducción del riesgo de desastres para la resiliencia; y mejorar la preparación para una respuesta eficaz y para una mejor recuperación, rehabilitación y reconstrucción. (ver video explicativo de Anna Ricoy, Oficial de Gestión del Riesgo de la FAO).

IMPACTOS A NIVEL GLOBAL

Según el informe global publicado por la FAO, los desastres naturales costaron a los sectores agrícolas de las economías de los países en desarrollo la alarmante cifra de 96 000 millones de dólares EEUU en daños a la producción agrícola y ganadera.

La mitad de estas pérdidas –por un valor de 48 000 millones de dólares- ocurrió en Asia.

La sequía -que recientemente ha azotado a los agricultores en los cuatro puntos cardinales del planeta- ha sido una de las principales culpables. Hasta el 83 por ciento de todas las pérdidas económicas causadas por la sequía documentadas por el estudio de la FAO correspondieron a la agricultura, con un coste de 29 000 millones de dólares EEUU.

“Los sectores agrícolas, que incluyen la producción agrícola y ganadera, así como la silvicultura, pesca y acuicultura, se enfrentan a muchos riesgos, como la volatilidad del clima y del mercado, plagas y enfermedades, fenómenos meteorológicos extremos y un número cada vez mayor de crisis y conflictos prolongados”, advirtió el Director General de la FAO, José Graziano da Silva.

LA GEOGRAFÍA DEL DESASTRE

En Asia, la región del mundo donde la agricultura ha resultado más afectada por los desastres, las inundaciones y tormentas provocaron los mayores impactos, pero los sistemas agrícolas asiáticos se vieron también muy perjudicados por terremotos, tsunamis y temperaturas extremas.

Tanto en África como en América Latina y el Caribe, la sequía es el tipo de desastre más costoso, causando pérdidas en los cultivos y el ganado de 10 700 y 13 000 millones dólares EEUU en esas regiones, respectivamente, entre 2005 y 2015.

Y en todo el planeta, los pequeños Estados insulares en desarrollo (PEID) son muy vulnerables a los desastres naturales, en particular tsunamis, terremotos, tormentas e inundaciones. Las pérdidas económicas en los PEID generadas por los desastres aumentaron de 8 800 millones de dólares EEUU en el período 2000-2007 a más de 14 000 millones entre 2008 y 2015, según el informe. (FAO)