Con documentos falsos, despojan de terreno al municipio

Valiéndose de un contrato en el que falsificó la firma de un reconocido Notario Público de Saltillo, una mujer de nombre Estela Aldape Maldonado despojó de un terreno de aproximadamente 8 hectáreas al Municipio de Saltillo, y pretende apropiarse de un total de 183.38 hectáreas ubicadas al sur de la ciudad.

Para lograr sus perversos fines, Aldape Maldonado se ostenta como propietaria de un predio de 183.38 hectáreas, las cuales, según ella, adquirió mediante un contrato de compra venta privado celebrado con una persona de nombre Cosme Francisco González Arriaga (supuesto vendedor), el cual asegura que fue pasado ante la fe pública del Licenciado Onésimo Flores Rodríguez, Notario Público Número 9 de Saltillo, el día 1 de noviembre del año 2011.

Pero resulta que el citado Notario, jamás firmó el dichoso contrato, el cual además ni siquiera está inscrito en el Registro Público de la Propiedad.

PRETENDE APROPIARSE HASTA DE LA ZONA ROJA

Valiéndose de este contrato falsificado, y aprovechando el descuido de las autoridades municipales de la pasada administración, Aldape Maldonado despojó al municipio de aproximadamente 8 hectáreas, desarrollando en ese terreno un fraccionamiento irregular sin servicios públicos de ningún tipo, mediante la venta ilegal de cientos de lotes a personas a las cuales les cobró decenas de miles de pesos a cada una con la falsa promesa de escriturarles posteriormente el predio que, en su ignorancia, le compraron pensando que en efecto era de ella.

Estas personas se encuentran ahora en el limbo, ya que adquirieron un predio caro, sin servicios, y que para colmo no era propiedad de la persona que les vendió, sino del municipio de Saltillo.

Un levantamiento topográfico elaborado por el Ing. Luís Antonio Martínez Reyes, perito acreditado ante el Tribunal Superior de Justicia de Coahuila, demuestra que, considerando el cuadro de construcción plasmado en el apócrifo contrato de compra venta con el que Estela Maldonado se ostenta como propietaria, éste pretende ser dueña de toda la Zona de Tolerancia, de las ocho hectáreas que se ubican en la parte sur de ésta y que son propiedad del municipio; así como de otros predios que son propiedad de la familia De La Peña, de Isauro Fraustro, de la familia Lara, entre otros.

 

EL CONTRATO ES FALSO: NOTARIO

Consultado al respecto, el reconocido Notario Público Onésimo Flores afirmó que él jamás firmó el contrato con el que Estela Aldape se ostenta como propietaria, y que ni siquiera la conoce a ella o al señor Cosme Francisco González.

Flores Rodríguez afirmó que está dispuesto a comparecer ante cualquier autoridad que se lo requiera para confirmar su postura, y además lamentó que haya personas que pretendan utilicen su buen nombre para cometer actos ilícitos. Dijo además que se reserva el derecho de denunciar por la vía penal a Aldape Maldonado en caso de ser necesario.

 

NO ESTÁ INSCRITO EN EL REGISTRO PÚBLICO

            Una consulta en el Registro Público de la Propiedad de Coahuila confirmó que el citado contrato privado con el cual Estela Aldape se ostenta como propietaria del predio del cual despojó al Municipio, no se encuentra inscrito ni existe alguna mención al respecto.

Esto demuestra una vez más que Estela Aldape está actuando con dolo y mala fe, estafando a cientos de personas a las cuales además ahora está presionando con quitarles los terrenos en dónde muchos de ellos ya construyeron sus viviendas, si se rehúsan a pagarle.

 

URGE UNA ACCIÓN DEL MUNICIPIO

Ante esta situación, y debido a la gran cantidad de personas afectadas, y a que el propio municipio fue despojado de su propiedad, urge que las actuales autoridades encabezadas por el alcalde Manolo Jiménez hagan algo al respecto:

  • Para evitar que Estela Aldape se siga apropiando de terrenos que no le corresponden.
  • Para regularizar la situación de las cientos de familias que fueron estafadas por esta mujer.
  • Para que el Municipio recupere los predios que son de su propiedad, y pueda además regularizar el fraccionamiento que de forma ilegal ahí se desarrolló.

 

(EL HERALDO)