EN EL TINTERO

JESSICA ROSALES 

Castigo corporal

¿Usted recuerda la chancla voladora? Esa que aventaba la abuela o la mamá como reprimenda a los niños que se portaban mal. ¿Usted les ha dado nalgadas a sus hijos como castigo por una mala acción?

Si es del 99.9 por ciento que alguna vez en su vida recibió una nalgada o la aplica como correctivo, olvídese de volverlo a intentar porque en Coahuila se prepara una iniciativa que castigará a todos aquellos que incurran en esta acción como medida de castigo.

Algunos piensan que una nalgada a tiempo es un remedio efectivo, de uso común en el pasado, pero ahora las leyes y el impulso de los derechos de las niñas y los niños lo ve como un acto políticamente incorrecto que se convierte en un tema de debate entre la sociedad.

En 2015, por ejemplo, Francia fue amonestada por el Consejo de Europa por no prohibir claramente todas las formas de castigo corporal a los niños, como las nalgadas, contrario a la mayoría de los países de la Unión Europea.

En México, actualmente la ley sanciona el castigo corporal pero no específica la nalgada como violencia; sin embargo, en Coahuila pronto entrará a la lista de acciones que podrían llevar a los padres de familia a someterse a un castigo legal.

¿Usted está de acuerdo en que dar una nalgada es violencia? ¿Debe prohibirse su uso en el hogar? Obviamente cuando la misma es excesiva implica un daño psicológico al menor porque estamos hablando de un golpe, pero hay casos en que la nalgada es prácticamente un rose que se aplica para que el niño tome conciencia de que está actuando mal.

Hay psicólogos que recomiendan la nalgada, pero en la actualidad algunos terapeutas destacan que hay medidas correctivas que no implican castigo físico, incluso aseguran que aplicar esta medida podría generar actitudes de resentimiento y de baja autoestima en los niños.

En Coahuila dicha acción se castigará con la obligación de ir a terapias familiares para proteger los derechos de los niños en un contexto de violencia que vive este sector de la población.

Es cierto que hay casos lamentables de niños víctimas de violencia, pero para especificar que la nalgada es un golpe, las autoridades tendrían que hacer un análisis a conciencia a través de la supervisión y contexto en el que vive el menor.

Qué hay de los niños que, debido a que su madre trabaja todo el día, viven encerrados en su hogar. Aquí hay una corresponsabilidad, ¿qué obliga a la jefa de familia a salir y dejar prácticamente abandonados a sus hijos?

Hay que ir al fondo y enfocarse a los problemas reales que enfrentamos como sociedad y, en conjunto, establecer políticas públicas efectivas que no sean sólo ocurrencias que sólo generen confusión en la población.