ONUSIDA, en la mira por escándalo sexual

GINEBRA. El director adjunto de ONUSIDA, el brasileño Luiz Loures, acusado de haber abusado sexualmente de una colega–pero absuelto en una investigación interna de Naciones Unidas– anunció este viernes que renunciará a su cargo, informó Excelsior.

Luiz Loures “comunicó al director ejecutivo de ONUSIDA su deseo de no postular para la renovación de su cargo”, dijo la agencia en un comunicado. El funcionario “terminará sus funciones como director ejecutivo adjunto a finales de marzo de 2018”, agregó.

El portavoz de ONUSIDA, Mahesh Mahalingam, dijo a los periodistas en Ginebra que la decisión de Loures no tenía relación con las acusaciones en su contra, y destacó que en la investigación interna de la ONU fue absuelto de supuestas irregularidades. “El doctor Loures ha tenido un largo y distinguido servicio de 22 años en ONUSIDA”, indicó Mahalingam tras sostener que él mismo sintió que este era el momento para cambiar.

Los investigadores de la Organización Mundial de la Salud (OMS) –organismo al que le correspondía la investigación dentro del sistema de la ONU– indicaron al anunciar el resultado de sus indagaciones que “no existían evidencias” para continuar con el procedimiento.

Una subordinada presentó una denuncia formal alegando que Loures la acosó sexualmente desde sus inicios en el organismo en 2011 y luego la agredió sexualmente en un ascensor en un hotel de Bangkok en 2015, donde ONUSIDA estaba organizando una conferencia.

La investigación interna realizada por la Oficina de Servicios de Supervisión Interna (IOS, por sus siglas en inglés), de la Organización Mundial de la Salud, arrojó que no había pruebas suficientes para respaldar las acusaciones.

No obstante, activistas y expertos legales cuestionaron la credibilidad de la investigación, insistiendo en que no fueron consideradas evidencias circunstanciales importantes.

La denunciante informó del supuesto incidente a su madre, a una amiga cercana y a su supervisor inmediato luego de lo ocurrido, mientras que varios colegas confirmaron haberla visto en un estado de gran angustia aquella noche.

Loures admitió ante la OIS haber mantenido una conversación sexual gráfica con su acusadora la noche de la conferencia, una definición del incidente que la mujer rechazó y que también consultaron los investigadores, según las conclusiones de la OIS. El jefe de ONUSIDA, Michel Sidibé, fue acusado por el IOS de tratar de resolver el caso en silencio. Loures fue designado por el exsecretario general de la ONU, Ban Ki-moon y ostentaba el cargo desde inicios de 2013. En un caso paralelo, pero separado, el director para Afganistán del Programa Mundial de Alimentos (PMA), Mick Lorentzen, también fue acusado de acoso sexual y suspendido de su cargo mientras se le investiga.

En la misma línea, este jueves se anunció la dimisión del número dos de Unicef, Justin
Forsyth, tras revelarse la supuesta conducta inapropiada que tuvo con empleadas de la ONG Save the Children, que había dirigido anteriormente.

Según informaciones que la ONU acaba de actualizar, entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre pasados se recibieron 40 denuncias de sus distintas entidades y de organizaciones civiles con las que colabora para implementar los proyectos o la acción de emergencia en el terreno.

ONG LAMENTAN LAS FALLAS EN EL SECTOR

Oxfam y Save The Children, entre otras, prometieron tomar medidas para proteger a los beneficiarios.

LONDRES.– Oxfam, Save The Children y otra veintena de organizaciones no gubernamentales firmaron este viernes una misiva en la que lamentaron las deficiencias provocadas en ese sector como consecuencia de los recientes escándalos sexuales destapados.

Los directores ejecutivos de estas organizaciones se comprometieron a “hacer más” para proteger los intereses de las personas que necesitan ayuda, “la razón de ser” de su existencia y las principales perjudicadas de esta crisis.

Además, aseguraron que tomarán medidas “urgentes e inmediatas” que incluirán más recursos para salvaguardar los derechos de los beneficiarios.

Ante el abuso de poder tiene que haber tolerancia cero”, subrayaron en la carta, en la que insistieron en la “obligación” que tienen como directores de “prevenir, detectar y erradicar cualquier comportamiento inaceptable”. Las ONG admitieron que las recientes revelaciones causaron “angustia y decepción generalizada” y que el sector necesita “un cambio fundamental”.

Anunciaron que “reforzarán” los sistemas de referencias para que, “personas que tengan antecedentes de conductas inapropiadas, no puedan ser contratadas”.

A su vez, el gobierno de Haití retiró temporalmente el permiso de operación a la representación británica de Oxfam, tras las denuncias de explotación sexual.

Por otro lado, la Fiscalía de Guatemala imputó ayer los delitos de fraude y malversación a 12 exfuncionarios del gobierno de Álvaro
Colom, entre ellos, el propio exmandatario y el expresidente de Oxfam Internacional, Juan Alberto Fuentes Knight, acusados de participar en una trama de corrupción en el transporte público.

RENUNCIA VICEPRIMER MINISTRO POR UN AFFAIRE)

SIDNEY.–Barnaby Joyce anunció que renunciará como viceprimer ministro de Australia después de salir a la luz un escándalo extramarital en medio de un intenso escrutinio sobre su conducta, compartió Notimex.

El también líder del Partido Nacional de Australia adelantó que dimitirá a la dirección de la organización política en el marco del escándalo que ha dominado los titulares australianos durante más de dos semanas.

Joyce, de 50 años, está en el centro de una tormenta mediática, desde la revelación a principios de febrero, de que dejó a su mujer por una antigua colaboradora, casi 20 años menor que él, y quien está embarazada del político. Éste reprochó la actitud de aquellos que han “filtrado” las informaciones sobre su relación con Vikki Campion, su exsecretaria, según el diario Herald Sun.

Asimismo, solicitó que la acusación de abuso sexual sea denunciada ante agentes de policía para que estos puedan llevar a cabo una investigación al respecto si así lo consideran. “Es increíblemente importante que se rompa el círculo. No sólo por el Parlamento sino por Vikki, por el hijo que espero, mis hijas y mi mujer”, aseveró.

“Esto tiene que parar. No es justo para ellas. Es completamente injustificado”, sentenció Joyce, todavía líder del Partido Nacional, uno de los pilares de la coalición conservadora formada con el Partido Liberal del primer ministro Malcolm Turnbull.

El escándalo llevó al primer ministro australiano, quien depende del partido de Joyce, a modificar el código de buena conducta ministerial, para prohibir las relaciones sexuales entre los ministros y sus colaboradores. (EXCELSIOR/NOTIMEX)