Organización Meteorológica Mundial advierte de ola de frío inusual en Europa

 (Xinhua/Bai Xueqi)

Ginebra.- La Organización Meteorológica Mundial (OMM) advirtió este viernes de una ola de frío de extensión inusual en gran parte de Europa antes de que termine el invierno en el hemisferio norte, acompañada de temperaturas excepcionalmente altas en el Artico.

A causa del evento de calentamiento súbito de la estratosfera, a unos 30 kilómetros sobre el Polo Norte, «un período de temperaturas significativamente por debajo de las normales (ola de frío) se espera para al menos esta y las próximas dos o tres semanas en la mayor parte de Europa (desde España a Grecia y de Irlanda a Rusia)», indicó el Centro Climático Regional de la OMM.

El calentamiento resulta de una partición de los vientos hacia el oeste de gran altitud que a menudo conduce a que los vientos orientales fríos de Siberia influyan en la temperatura en Europa.

El evento de calentamiento estratosférico condujo a una división del vórtice polar que se ubica en una zona de baja presión en la atmósfera superior, con vientos del oeste arremolinados que circulan en su alrededor. Normalmente, estos vientos son lo bastante fuertes para mantener el aire más frío en el Artico durante el invierno.

Tal evento llevará los días más fríos de la semana a partir del 26 de febrero y las temperaturas se ubicarán en -10 grados centígrados en Rusia, Bielorrusia, Ucrania y Polonia.

Las temperaturas mínimas se ubicarán diariamente por debajo de los 0 grados centígrados incluso en el sur de Europa. Este período de frío con escarcha en la superficie podría congelar los cultivos y será un riesgo mortal para personas vulnerables expuestas al frío, advirtió la OMM.

En contraste, parte del Artico ha registrado temperaturas excepcionalmente altas. La temperatura en la estación meteorológica en el Cabo Morris Jesup, en el septentrión de Groenlandia, uno de los puntos más cercanos al Polo Norte, ha superado en diversas ocasiones el nivel de congelamiento desde el 16 de febrero.

La OMM concluyó que el calentamiento del océano Artico parece derivar en parte del patrón de circulación atmosférica que lleva el aire hacia el sur y en parte por la liberación de calor hacia la atmósfera desde zonas de mar abierto. (XINHUA)