La Tregua Olímpica y su mensaje de paz inspiran a un corredor refugiado

 

El atleta refugiado Yiech Pur Biel envió un mensaje de paz a su llegada a Corea del Sur para participar en los Juegos Olímpicos de Invierno.

El corredor sursudanés aseguró que “la paz es el fundamento de todo lo que los Estados pueden hacer”, durante una conferencia en Seúl sobre los Objetivos Desarrollo Sostenible de la ONU.

“Una persona necesita muchas cosas – vivienda, alimentos, agua, educación y servicios médicos – para sobrevivir, pero ¿qué significan todas estas cosas sin paz? Como refugiado que huyó de un país en conflicto, sé lo importante que es la paz “, dijo.

La estrella del atletismo se vio obligado a huir de la guerra en Sudán del Sur en 2005, a la edad de 10 años, dejando a sus padres y llegando solo al campo de refugiados de Kakuma en el norte de Kenia.

Pur fue invitado a unirse a la ceremonia de inauguración del “Mural de la Tregua” del Comité Olímpico Internacional y aseguró que se encuentra muy conmovido porque Corea del Norte y del Sur marcharán bajo la misma bandera en los Juegos, que comenzarán este viernes.

La Tregua Olímpica se remonta a la Antigua Grecia, donde los atletas, artistas y sus familias, así como el resto del público, podían viajar con total seguridad para asistir a los Juegos Olímpicos y después regresar a sus respectivos países.

Este miércoles, el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, quien se encuentra en PyenongChang, exhortó a las Coreas a que observen esta tregua, cuyo mensaje fundamental es que “nuestra humanidad común puede trascender las diferencias políticas”, un ideal que “resuena más que nunca en la península de Corea”, expresó.

Desde los Juegos de Invierno en Turín en 2006, la Tregua ha estado representada por un Mural, en el que atletas y oficiales escriben para inspirar la paz a través del deporte.

Durante su discurso ante la prensa Yiech Pur Biel recordó el emotivo momento en el que pudo hablar de nuevo con su madre por teléfono justo después de haber sido seleccionado para competir por el primer Equipo Olímpico de Refugiados en el evento de 800 metros en los Juegos de Río en Brasil.

El atleta hace parte de la Fundación Olímpica para Refugiados que provee instalaciones deportivas para niños refugiados, desplazados y vulnerables y busca utilizar la actividad física como una herramienta de cambio para los menores en todo el mundo. (CINU)